Redacción- La fiesta desmedida de 54 conductores bajo los efectos del alcohol, en Semana Santa, terminó en los tribunales de Justicia. Otro conductor también quedó a disposición de las autoridades judiciales por conducir a más de 150 km/h. Ambas conductas constituyen un delito penal.

El Director de la Policía de Tránsito, Mario Calderón, destacó que los casos de alcohol detectados son el resultado de 2.422 pruebas realizadas en más de 20 operativos de control de esta conducta irresponsable.

El funcionario agregó que otras 19 personas conducían con un nivel de alcohol no tan alto, respecto a los otros 54 casos y recibieron una multa de ¢309.574,47.

En otras 21 pruebas que dieron positivo no ameritó sanción, según lo establece la Ley de Tránsito, dada la baja concentración de licor en el organismo de estas personas.

Exceso de velocidad

Otra de las conductas que más atacó la Policía de Tránsito durante Semana Santa fue el abuso de velocidad. Realizaron 148 operativos contra este comportamiento temerario.

Los resultados permitieron sorprender a un conductor a más de 150 km/h, lo que constituye un delito penal, de ahí que fue remitido al Ministerio Público para que afronte una causa en su contra. #AMPrensa