Redacción/Agencias- Barack Obama se convirtió este viernes en el primer presidente de Estados Unidos en ejercicio que visita la ciudad japonesa de Hiroshima, 71 años después de que su país lanzara el primer ataque atómico en la historia.

«Venimos a reflexionar sobre la terrible fuerza desatada en un pasado no muy lejano», dijo Obama después de depositar una ofrenda floral en un monumento por la paz.

Antes de colocar la ofrenda, Obama visitó un museo donde se exhiben recuerdos del bombardeo atómico, que incluyen fotografías de las víctimas con graves quemaduras.

Tras su discurso, el presidente estadounidense conversó brevemente con dos sobrevivientes al bombardeo atómico, Sunao Tsuboi, de 91 años, y Shigeaki Mori, de 79 años.

La Casa Blanca había debatido si la visita a Hiroshima era adecuada, sobre todo en año de elecciones presidenciales, pero los asesores de Obama aseguraron que el presidente no cuestionaría la decisión de lanzar las bombas.