Redacción- Los perros ven a los sapos como una presa, por lo tanto los atrapan y se ven afectados por el veneno de estos. Es importante saber que todos los sapos secretan una sustancia a través de su piel que tiene un mal sabor para otros animales, pero las especies de sapos mortales, cuando se sienten intimidados, expulsan una sustancia química sumamente tóxica que se absorbe a través de las membranas de la boca del perro y en muchas ocasiones por los ojos.
Algunos de los síntomas de una intoxicación son el babeo severo, rascado de la boca u ojos, dificultad para respirar, diarrea, vómito de líquido amarillo, alta temperatura, signos neurológicos como pupilas dilatadas, pérdida de la coordinación, llanto y convulsiones.
El envenenamiento provocado por un sapo se considera una emergencia médica mortal. Si sospecha que su mascota ha estado expuesta a una especie mortal de sapo, enjuague su hocico inmediatamente y asista a un veterinario lo antes posible para ponerlo en el tratamiento adecuado.#AMPrensa
