Redacción – El Manchester City sometió al Manchester United en el derbi, acogido en Old Trafford (1-2), que contempló el nuevo cara a cara entre Pep Guardiola y Jose Mourinho, en la primera cita de ambos en la Premier League , inclinado claramente del lado del preparador español.

Los citizens consolidaron su liderato en la competición inglesa, donde contabilizan por victorias sus partidos, cuatro, y rentabilizaron especialmente el rendimiento ofrecido en la primera parte, donde fueron claramente a un rival aún por hacer. Cargado de grandes jugadores pero sin una determinación clara para imponer su juego.

El United, que afrontó también el choque invicto antes del parón por los partidos internacionales después de ganar al Hull, Southampton y Bournemouth, encajó su primer revés del curso. Sobrevivió hasta el final por su fe y su empuje, estimulados por las estrecheces de un marcador que mereció ser más amplio y por las indecisiones de su portero, el chileno Claudio Bravo.