Redacción- Aunque la semana anterior la gasolina regular y el diésel presentaron una ligera disminución en el precio, ese efecto podría revertirse en las próximas semanas.

Así lo explicó el decano de la facultad de economía de la Universidad de Costa Rica (UCR), Carlos Palma, quien mencionó que en el mundo hay cierta incertidumbre ante la posibilidad de que la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP) recorte la producción de petróleo a nivel mundial.

Según Palma, de darse ese recorte tal y como ya lo han dejado ver algunas autoridades de ese organismo, el país empezaría a sentir un impacto en la factura por el pago de hidrocarburos.

«Evidentemente los productores de petróleo siempre buscan de que manera aumentar o influir en el precio del petróleo (…) La mejor manera de aumentar los precios es disminuyendo la producción; cualquier disminución por pequeña que sea, tiene un gran efecto aumentando el precio» mencionó Palma.

Para el economista, esa variación que se daría a conocer en las próximas dos semanas, influirá directamente en un aumento en el precio de la gasolina, pero además afectará otras variables económicas.

Además del combustible, el experto estima que el sector transporte también tendrá una repercusión y por supuesto, la inflación también tendrá una tendencia al alza.

«Los que salen perjudicados con esta decisión son los países importadores -como es el caso de Costa Rica-, ya que un aumento en el precio del petróleo tiene varias consecuencias. En primer lugar es petróleo es la materia prima para la producción y los costos de transporte y en segundo lugar, el Banco Central tendrá una perdida de reservas para pagar el costo adicional de la factura petrolera, lo cual generará una devaluación del colón y aumentará la inflación» argumentó Palma.

Según el economista, el hecho de que Recope no refine sino compre ya producto terminado también influye en el precio, pues no hay maniobra para bajar costos en la producción, pues ya se paga por toda la cadena.