Redacción – Un fuerte terremoto de magnitud 7,4 sacudió Nueva Zelanda en la medianoche del domingo (hora local), según registró el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).

El primer ministro John Key confirmó que al menos dos personas murieron. Asimismo, el mandatario advirtió que el número podría aumentar, pero aclaró que carecían de precisiones, dados los problemas de comunicación con la zona afectada.

El sismo se  produjo en la región de Canterbury, en la Isla Sur del país. El epicentro, a 10 kilómetros de profundidad, también está ubicado a 100 kilómetros de Christchurch, la ciudad sureña más grande, donde en febrero del 2011 murieron 185 personas por un terremoto de 7 grados.

El Ministerio recomendó a los habitantes de los balnearios cercanos que se desplacen «hacia zonas elevadas o lo más posible tierra adentro», así como subir a los pisos superiores de los edificios o incluso a los árboles.

Según las autoridades, casas y calles agrietadas, así como edificios seriamente dañados son parte de las consecuencias que dejó este movimiento.