Redacción- El pastor alemán es un perro de trabajo que necesita un lugar donde orientar toda su energía, tanto mental como física a través del ejercicio, esta raza tiene un buen carácter para ser un compañero de familia.

El pastor alemán al tener la capacidad de aprender rápidamente ha sido utilizado como perro pastor, perro guardián, perro policía, para la búsqueda y como perro del ejército. El pastor alemán también sobresale en muchas otras disciplinas, como el seguimiento, la obediencia, el agility y en otras actividades. Es importante reconocer que su gran olfato le permite rastrear drogas, intrusos, incluso también puede alertar al ejército de minas subterráneas o de una fuga de gas en una tubería hasta de 15 metros bajo tierra.

El cuerpo de esta raza está muy bien proporcionado, es un perro fuerte, con un cuerpo robusto, ligeramente alargado, musculoso y con una estructura ósea muy sólida. La cabeza debe ser proporcionada al cuerpo y la frente un poco más redondeada. La mandíbula tiene una fuerte mordida en forma de tijera. Las orejas son anchas en la base y en posición vertical. Las orejas de los cachorros que tienen menos de seis meses pueden inclinarse ligeramente. La cola tiene un pelaje espeso llega hasta por debajo de los corvejones y cuelga hacia un lado cuando el perro están reposo. Tanto las patas delanteras como los hombros están muy musculados, con huesos fuertes y robustos.

En muchas ocasiones las enfermedades hereditarias han provocado la displasia de cadera y de codo, así como algunos problemas sanguíneos, dermatitis, epilepsia, queratosis (inflamación de la córnea), enanismo y alergia a las pulgas. #AMPrensa