Redacción -Tener un perro va más allá de brindarle un techo dónde dormir, servirle concentrado y sacarlo de vez en cuando. Si bien son animales muy resistentes y llevaderos, serle fiel a su mejor amigo conlleva un número de cuidados y atenciones que no se pueden ignorar.

De lo contrario, no solo se degenera su aspecto, sino que su perro podría llegar a tener parásitos, presentar afecciones en la piel y sufrir infecciones crónicas en los ojos y oídos.

Ante todo la higiene 

El cuidado higiénico de un perro se reduce al siguiente listado: baño, cepillado, cuidado dental y limpieza de oídos y ojos. Al cumplir con estos cuidados con regularidad podrá ahorrarle problemas mayores de salud para su perro.

Para empezar, limpie esporádicamente los ojos y oídos de su mascota para evitar que la mugre obstruya los órganos y cause infecciones. Este proceso es muy sencillo, tan solo debe tomar un copito o un pañito para retirar los excesos de cera y lagañas.

También debe cepillar sus dientes y pelaje. Los perros son propensos a sufrir de sarro y gingivitis, motivo que les causa un mal aliento y les deteriora su mordida. Para prevenirlo, puede comprar un cepillo de dientes y crema dental especializada o frotarle un paño empapado una vez por semana.

Acerca del pelaje, todo depende de la raza. Un perro de pelo corto debe cepillarse semanalmente, mientras que uno de pelo largo debe hacerlo diariamente. El objetivo de cepillarlo es remover suciedad y pelo muerto que pueden dar la cabida a hongos o eccemas.

Paseos y ejercicio

La falta de actividad física puede causarle problemas de salud y de carácter al can, ello hace más difícil su cuidado y mantenimiento en el hogar. Sáquelo con frecuencia, en horarios fijos y por periodos prolongados, ya que es probable que el perro haya pasado gran parte del día inactivo mientras usted trabajaba.

Es importante entender que cuando el perro sale a hacer sus necesidades este no se ejercita, por lo cual es necesario tener actividades adicionales al simple paseo. Hacer una caminata de al menos 30 minutos con su perro, jugar a la pelota o trotar en su compañía es un buen plan, pues así también se fortalecen los lazos entre los dos.

¿Qué comer?

El tema de la alimentación de un perro es supremamente importante porque de ello va a depender el estado físico y emocional de este. No se trata de darle de comer sino de nutrirlo.

Si bien es cierto que un perro puede comer casi todo lo que nosotros comemos, hay alimentos que le favorecen y otros que no le debe dar bajo ninguna circunstancia (ver recuadro).

Para comenzar, tenga en cuenta que los perros son carnívoros por naturaleza y los hemos vuelto omnívoros a la fuerza. Por ello su dieta se basa principalmente en carne y se puede complementar con diferentes verduras, frutas y carbohidratos sin grasas o condimentos.

¿Qué hay del concentrado?

Esta dieta viene específica para perros y si no tiene la disponibilidad de tiempo para aprender a cocinarle alimentos adecuados, es la mejor opción. Se puede encontrar como alimento seco (concentrado), alimento húmedo (latas) o deshidratado (platos con carnes, verduras y cereales intactos). Al comprar concentrado asegúrese de darle lo necesario a su perro en nutrientes y vitaminas. Fíjese que sean de buena calidad con productos frescos y naturales, y una alimentación balanceada.

Fuente eltiempo.com