Redacción – La madre que figura como la principal sospechosa de asfixiar y acabar con la vida de su hijo recién nacido pasará tres meses en prisión preventiva luego de que la Fiscalía de Turrialba lograra su detención este lunes.

La mujer, de apellidos Calvo Obando, será indagada en el transcurso de la mañana, para posteriormente realizarse la audiencia de solicitud de medidas cautelares ante el Juzgado Penal de la provincia.

Calvo, de 41 años, fue capturada por oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en el centro de Turrialba, y posteriormente fue trasladada al Ministerio Público.

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Los hechos por los que se investiga a la sospechosa ocurrieron la madrugada del 17 de junio del 2016, al costado este de la plaza pública de Turrialba, cuando la sospechosa dio aviso a las autoridades de que, en la parte trasera de su casa, había una bolsa de basura con un feto.

Según la versión de la mujer, alguien pudo haber tirado al bebé desde un camino que comunica con otro barrio del lugar.

Ante sospechas de la Fiscalía en contra de Calvo, se inició una investigación en contra de ella y dio orden al OIJ de realizar un secuestro de la basura de esa casa; al inspeccionarla, se encontraron desechos con sangre, los cuales fueron utilizados para comparar el ADN del bebé con el de la sospechosa.

El resultado de esos análisis, que confirmó la coincidencia entre el ADN de ambos y fue entregado la semana anterior a la Fiscalía.

Tras una serie de pruebas efectuadas en la casa, se dio con rastros de sangre en el cuarto de pilas y el resultado de la autopsia practicada al bebé resultó en muerte por asfixia.

La Fiscalía maneja como posible móvil de los hechos que la sospechosa aparentemente intentó ocultar a su esposo la existencia del bebé, por ser hijo de otro hombre.