Redacción- Las reglas son exactamente las mismas. Son once contra once y gana los tres puntos quien anota más goles en el marco rival. Sin embargo, en cuanto a infraestructura y planilla, las diferencias entre el fútbol mexicano y el costarricense son enormes. Abismales. Nos ganan por goleada.
El actual líder de la Liga MX es el Club Tijuana, mientras que el del fútbol costarricense es el humilde Limón FC y la distancia entre estas escuadras en abismal.
Los caribeños cuentan con su propio estadio, el Juan Goban, que tiene capacidad para 3500 espectadores y el valor aproximado de su planilla es de 3 millos de euros. El apoyo económico que tiene este equipo es de negocios o empresas de la localidad, lo que hace que sus ingresos por patrocinadores no sea muy alto.
A muchos de sus jugadores con el pequeño salario que reciben no les alcanza para vivir, por esta razón, la gran mayoría tiene otro trabajo ajeno al fútbol, para mejorar sus ingresos económicos.
Limón no cuenta con centro de entrenamiento, gimnasio o algún trato especial para sus jugadores, ya que su presupuesto es muy reducido y apenas le alcanza para mantener el equipo a flote.
La mayor parte de su plantel es conformado por jugadores de la cantera, principalmente de origen limonense, en la planilla solo cuentan con tres extranjeros de nacidos en Serbia, que llegaron al equipo de manera gratuita y todavía no han tenido participación en el torneo.
Xolos de Tijuana además de contar con su estadio Caliente de 30 mil espectadores, que está en proceso de remodelación, tienen una casa club para los jugadores, donde hay habitaciones, centros de recreación, campos de entrenamiento, gimnasio, comedor y centro médico. 
El valor total de su planilla, ronda los 30 millones de euros, 10 veces más que la de los caribeños.
A sus jugadores se les da un trato especial que incluye alimentación, servicios médicos, psicólogos y en algunos casos hasta transporte.
En la planilla cuentan con nueve jugadores foráneos y seis que son de origen extranjero pero portan la nacionalidad mexicana.
Para el presente torneo, los aztecas hicieron el fichaje del argentino Matias Pisano, les costó tres millones de euros, con esta contratación, podrían comprar toda la planilla de Limón FC.
El presupuesto que maneja el equipo azteca es completamente superior a cualquier equipo de Costa Rica y esto se ve plasmado en el fútbol que desarrollan.
No solo son más avanzados en infraestructura, también son completamente superiores en los fichajes que hacen en sus equipos.
Recientemente en la Liga MX, fue eliminado el límite de extranjeros que puede tener un equipo, esto también es un factor determinante, ya que los aztecas buscan reforzar sus equipos con estrellas de cualquier parte del mundo.
Esto da pie a que varios equipos mexicanos hicieran contrataciones de alto calibre mundial, ya que los salarios de esta liga se vuelven muy atractivos para los deportistas.
- André Pierre Gignac – 7 millones de euros (Tigres UANL)
- Eduardo Vargas – 6 millones de euros (Tigres UANL)
- Martin Cauteruccio – 2.5 millones de euros (Cruz Azul)
- Enzo Roco – 2.5 millones de euros (Cruz Azul)
- Marcelo Barovero – 2.5 millones de euros (Necaxa)
- Édson Puch – 1.8 millones de euros (Necaxa)
- Nicolas Castillo – 2 millones de euros (Pumas)
- Franco Jara – 3.5 millones de euros (Pachuca)
- Jonathan Urretavizcaya – 2.8 millones de euros (Pachuca)
- Matias Pisano – 3 millones de euros (Xolos)
Muchos de estos jugadores han tenido recorrido en el futbol europeo y con sus selecciones nacionales, esto hace que la liga mexicana incremente su nivel y aleje más al resto de Centroamérica.
Aunque a nivel de selecciones absolutas, los mexicanos y los costarricenses no tienen tanta diferencia, las ligas locales están a años luz de distancia.
Así es, pero el tema es que entonces eso justifica la mediocridad de saprissa, alajuela, heredia que van a la concachampions y pierden todos sus partidos por goleadas ? Creo que no. Es un asunto de actitud, vean el caso de Inglaterra, que un equipo pequeño es campeón, o el caso del Capecohense, que venia de la tercera división. Y dejo en el camino a los poderosos clubes suramericanos.
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