Redacción – El lugar más sagrado del cristianismo fue restaurado y es visitado esta Semana Santa por fieles de todo el mundo.

La antigua gloria de la tumba de Jesús ha cobrado nueva vida. El Edículo, santuario que se cree que incluye la caverna donde Jesús fue sepultado y desde donde ascendió al cielo, ha sido renovado justo a tiempo para la Pascua.

Durante la histórica renovación realizada por un equipo griego se retiró la antiestética celda de hierro que rodeaba al santuario, construida por las autoridades británicas en 1947 para dar soporte a las paredes.

Donde la tradición cristiana sitúa el enterramiento y resurrección de Jesús, un equipo griego liderado por Maropoulou ha trabajado desde el pasado mes de julio en una intervención de urgencia para evitar que el venerado lugar se hundiera.