Redacción – La piel es uno de los órganos más importantes y más extensos del cuerpo, y como consecuencia del paso del tiempo, alrededor de los treinta años empieza a presentar algunos cambios a causa del envejecimiento.

Además de pequeñas líneas de expresión en el rostro, especialmente alrededor de los ojos y labios, y la disminución del brillo y la tersura, se da el cambio en la coloración, el cual este proceso es causado por factores intrínsecos y extrínsecos.

Los factores externos tienen que ver fundamentalmente con el ambiente: la polución, el humo de cigarrillo, la exposición a los rayos ultravioletas y las temperaturas extremas.

El contraste que se produce cuando salimos del calor del hogar al frío de la calle, deshidratan, resecan, dan opacidad y fragilidad a la piel.

Todo esto se suma a las agresiones que sufre en el verano por la exposición al sol, al mar, al cloro de las piscinas y al aire acondicionado, estos agentes agentes provocan la formación de radicales libres que causan daños químicos en lípidos, proteínas y en el ADN, limitando en parte, algunas de las funciones e integridad de las células.

Por ejemplo, los rayos ultravioletas son responsables en un 90% del envejecimiento prematuro de la piel y la mayor proporción de radiación estos rayos la recibimos antes de los veinte años.

Los factores intrínsecos están relacionados con el reloj biológico determinado genéticamente como parte de nuestro proceso vital. A partir de los veinte años comienza el envejecimiento más allá de los factores externos.

Si bien el reloj biológico avanza como proceso natural, algunos consejos para detener el envejecimiento prematuro son:

– Usar protector contra las radiaciones UVA y UVB todos los días.

– Higienizar el rostro con regularidad.

– Utilizar cremas humectantes diariamente.

– Recomendamos cremas con antioxidantes para eliminar los radicales libres.

– Realizar exfoliaciones semanales para eliminar las células muertas.

– Llevar una vida sana que involucre ejercicio diario y una dieta equilibrada moderando al mínimo el consumo de alcohol, cigarrillo y café.