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San José – El tipo del cambio del dólar amaneció este martes en casi 600 colones, situación que, según expertos, es preocupante para quienes tienen créditos en dólares.

En el Banco de Costa Rica, la venta del dólar amaneció en 590 colones, mientras que la compra en 578 colones, al igual que el Banco Nacional.

Carlos Palma, economista de la Universidad de Costa Rica (UCR), ha señalado que tres fenómenos externos y uno interno provocan esta enorme presión que tendrá sus implicaciones sin lugar a dudas en el costo de la vida, pago de créditos, entre otras consecuencias.

“El fenómeno hay que verlo desde varias puntos de vista. Hay una mayor demanda de dólares (quienes buscan la moneda) en contra de una una oferta menor de la divisa disponible y esto surge como consecuencia de una política propia del gobierno de Trump que busca que empresarios regresen sus capitales que estaban en países como el nuestro hacía los Estados Unidos; también incide el aumento en las tasas de interés de la Reserva Federal de ese país y el aumento en el precio de los productos terminados del petróleo a nivel mundial, pues Costa Rica no refina y debe comprar el producto listo”, mencionó el especialista.

Incluso, el experto señaló el viernes anterior que el precio del dólar superaría los 600 colones a finales de año; sin embargo, apenas varios días después, el tipo de cambio está a punto de superarlo.

Esta devaluación de la moneda costarricense afecta, en gran medida, a aquellas personas que tienen créditos en dólares, pero ingresos en colones. Por ejemplo, una mensualidad de $500 al pasarla a colones tuvo un crecimiento de ¢13 mil. Por ello, los economistas siempre advierten sobre la responsabilidad de adquirir préstamos en otra moneda diferente al salario.

Sobre la situación país, Palma aseguró que al gobierno se le acabaron los recursos en dólares disponibles para financiarse con deuda interna, pues los cerca de cuatro mil millones dólares que se obtuvieron de los “Eurobonos” ya se agotaron para subsanar el hueco que deja el déficit fiscal en la hacienda pública.