Redacción – Una buena manicura y pedicura son rituales de belleza que ya forman parte de los cuidados estéticos que demanda el hombre de hoy.

La correcta hidratación de manos y pies es fundamental, pero no hay que olvidar que las uñas también tienen su importancia.

Estrechar la mano de alguien con las uñas mordidas, agrietadas o con manchas blancas o amarillentas no es el mejor comienzo para una relación de negocios o de amistad.

Revíselas con frecuencia al menos una vez a la semana y compruebe que están en perfecto estado, ya que en ellas, está, en parte, el secreto de unas manos bonitas.

A la hora de cortarlas, utilice siempre unas tijeras de manicura y córtalas rectas (cuadradas). Procure dejar la longitud justa para que no parezcan demasiado largas, pero no las deje excesivamente cortas, ya que, deben cumplir su misión de proteger la sensible yema de sus dedos.

En el cuidado de las uñas masculinas, no se debe abusar de la lima (no requieren forma). Este útil instrumento te vendrá bien únicamente para alisar algún pico fruto de un recorte mal finalizado y también para ejercer una función abrasiva sobre la superficie de la uña en aquellos casos en los que existan manchas o rugosidades (habitual en las personas que se las han mordido durante años).

Si tiene pequeñas fisuras o grietas, tal vez producidas por haber estado en contacto con algún producto abrasivo sin los necesarios guantes o simplemente porque sus uñas están débiles, puede mejorarlas notablemente utilizando esmaltes y productos “selladores” ricos en aceites vegetales (oliva, almendra.)

Respecto a las manchas, algunas pueden ser fruto de deficiencias en la alimentación (falta de calcio y zinc) por lo que deberá consultar con el médico nutricionista, pero otras tienen una solución estética bastante sencilla.

Por ejemplo, si sus dedos (y uñas) presentan zonas amarillentas (muy común entre los fumadores) tiene tratamientos despigmentantes altamente eficaces que se realizan en el salón de belleza. Si es de los que prefiere los remedios caseros, pruebe a frotar las manchas con jugo de limón.

Como última recomendación, tenga presente que, en ocasiones, las manchas (sobre todo las de las uñas de los pies) pueden deberse a la presencia de hongos por lo que, si no tiene claro su origen, no está de más consultar con un especialista.