Redacción/Agencias – El ministro español de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, afirmó este jueves tras reunirse con su homólogo de EEUU, Rex Tillerson, que «hay que seguir aumentando la presión para que Venezuela vuelva a ser una democracia», e indicó que se trabaja sobre un posible encuentro entre los presidentes Mariano Rajoy y Donald Trump.
«Hay que seguir aumentando la presión para que Venezuela vuelva a ser una democracia, se libere a los presos políticos y haya elecciones de verdad, libres, universales y secretas», dijo Dastis a los periodistas a las puertas del Departamento de Estado, tras su encuentro con Tillerson, con quien dijo haber coincidido en esa posición.
Dastis recalcó que hay que trabajar «sobre todo con los países de la zona», y lamentó por ello que «la iniciativa de México en la Organización de Estados Americanos (OEA) no tuviera éxito».
En su asamblea anual de este año, celebrada en Cancún a mediados de junio, la OEA no logró aprobar la iniciativa de México, respaldada por EEUU, de incluir una referencia a la crisis de Venezuela en la resolución general sobre derechos humanos.
La falta de referencia a Venezuela fue interpretada como una victoria diplomática por parte del régimen militar de Nicolás Maduro.
Como alternativa, el ministro español apuntó a la posibilidad de crear «un grupo de amigos» que permita que «las dos partes (Gobierno y oposición) puedan sentarse a hablar» para «poner fin a esta situación trágica de crisis económica, política, humanitaria en que vive Venezuela».
«Intentos y presión por nuestra parte no va a faltar» para que finalmente se celebren «elecciones libres», remarcó Dastis en este sentido.
La ONU calificó este viernes de «profundamente preocupante» el proceso de enjuiciamiento de la fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, la prohibición impuesta a la misma de salir del país y la congelación de sus activos, al igual que la anulación de la designación del vicefiscal Rafael González.
«La decisión del Tribunal Supremo de Venezuela del 28 de junio de comenzar los procedimientos para la remoción de la fiscal general, congelar sus activos y prohibirla salir del país es profundamente preocupante, al igual que lo es la continuada violencia» en la nación sudamericana, dijo el portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Rupert Colville.
«También nos inquieta la decisión del 27 de junio por parte de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia de declarar nulo el nombramiento de ella, del vicefiscal general y de designar en su lugar a un ‘número dos’ temporal, en violación de los procedimientos bajo la legislación venezolana», afirmó.
Igualmente denunció la ONU la decisión de la Sala de asignar algunas de las funciones exclusivas de la fiscal general hasta ahora al defensor del Pueblo de Venezuela, Tarek William Saab.