Redacción- Ya son alrededor de 350 fincas ganaderas del país las que actualmente aplican en sus sistemas productivos las Medidas de Mitigación Nacionalmente Apropiadas, NAMAs, que impulsa el Ministerio de Agricultura y Ganadería por medio de la Estrategia Nacional de Ganadería Baja en Carbono.

“Se trata de fincas de ganadería de carne, de leche y doble propósito, que se convierten en unidades educativas abiertas para otros productores del país. Las experiencias de adopción de tecnologías y el análisis de resultados permiten extender el conocimiento a otros productores a través de las Escuelas del Campo, las cuales son promovidas por CORFOGA durante los próximos días en un taller nacional», detalló Mauricio Chacón Navarro, Gerente del Programa Nacional de Ganadería y coordinador de la Estrategia Nacional de Ganadería baja en Carbono.

Los ganaderos aplican en estas fincas diversas tecnologías que procuran que su   actividad sea más eco-competitiva. Entre esas prácticas figuran, pastoreo racional, fertirriego de purines, establecimiento de bancos forrajeros (bancos proteicos y/o bancos energéticos), y la cosecha de agua de lluvia para las actividades propias de la actividad, entre otras.

Este esfuerzo ha sido apoyado por varios donantes bilaterales y contrapartes técnicas incluyendo al Gobierno de Estados Unidos, Reino Unido y Nueva Zelanda.