Redacción – Científicos afirman que comerse los mocos es saludable, pues contribuye a reforzar el sistema inmunológico. Increíble, pero cierto.

Así lo asegura el neumólogo austriaco, Friedrich Bischinger, que después de diversos estudios, ha podido comprobar que los niños que se meten el dedo en la nariz, y además se comen los mocos, van a tener una vida más sana y saludable.

El doctor Bischinger afirma que «con los dedos se llega a partes del interior de la nariz a las que no se puede llegar con un pañuelo, y de esta forma se consigue mantener limpio el interior de las fosas nasales».

El asunto tiene su explicación, pues según el galeno, el hecho de meterse el dedo en la nariz y comerse el moco es «de sentido común y muy natural en el ser humano, pues es una buena manera de reforzar el sistema inmunológico».

La nariz funciona como un filtro donde se concentran las bacterias que, con el aire, intentan entrar en nuestros pulmones.

«Cuando nos comemos el moco, este funciona como una especie de vacuna», dijo el doctor, y añadió también que la medicina moderna intenta hacer lo mismo pero de una forma algo más complicada. «La gente que se mete el dedo en la nariz y después se come los mocos, consigue reforzar su sistema inmunológico de una forma natural y gratuita». Y es que al comerse los mocos se expone al sistema digestivo a las bacterias acumuladas en la mucosidad, ayudando así a reforzar el sistema inmunológico de cada individuo.

Los niños suelen practicarlo de forma instintiva, pero la presión social hace que cuando son mayores dejen de hacerlo.

Y no es solo él, porque recientemente un grupo de investigadores británicos y estadounidenses ya habían señalado que el acto de meterse un dedo en la nariz es una actividad estimuladora de una parte del cerebro, y también afirman en sus conclusiones que debe animarse a los niños a que lo hagan con mas frecuencia.