Redacción – A paso firme, así califican autoridades de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) el avance del proyecto constructivo del nuevo hospital de Puntarenas. 

Según explicó el ingeniero Jorge Granados Soto, Gerente de Infraestructura y Tecnología en ejercicio de la CCSS, en este momento ya se finalizó con la preparación del anteproyecto arquitectónico, este anteproyecto define las características de infraestructura y de los diferentes servicios médicos y no médicos que se brindarán en el Nuevo Hospital.

«Tenemos el anteproyecto totalmente finalizado y estamos por iniciar una serie de estudios previos para poder finalizar esa primera etapa. Estos estudios incluyen el de factibilidad vial, hidrología e impacto ambiental necesarios para desarrollar la nueva obra», comentó el ingeniero, quien agregó que también está por iniciar la etapa de revisión y validación del proyecto por parte de los funcionarios del Hospital Monseñor Víctor Manuel Sanabria Martínez.

Según el ingeniero Granados, ya se realizó la precalificación de las empresas que concursarán para el diseño, construcción y equipamiento del nuevo hospital, proyecto que requerirá de una inversión cercana a los $178 millones, y se está en la elaboración del Cartel de licitación y especificaciones técnicas, por lo que se espera publicar esa licitación a finales de este año.

«La precalificación de las empresas nos va a permitir avanzar todavía más rápido en la etapa de contratación administrativa», comentó el funcionario.

El nuevo hospital estará ubicado en Barranca, entrará en operación en el año 2021, y tendrá un incremento sustancial en infraestructura y oferta de servicios en  relación con la situación del hospital actual antes del terremoto del 05 de setiembre de 2012.

Por ejemplo, entre sus 70 mil metros cuadrados de construcción, el nuevo hospital tendrá 64 consultorios (12 más que en el hospital anterior), 12 quirófanos (antes eran solo 7), 350 camas de hospitalización (en lugar de las 218 que había antes), 43 camas de observación en emergencias (antes eras 7) y 4 salas de partos (dos más que en el hospital actual).

«Se crece, prácticamente, en todas las áreas del hospital», enfatizó el ingeniero Granados, quien explicó que con este nuevo edificio se busca dar respuesta a los problemas generados por la disminución del área útil de la edificación existente debido al terremoto de 2012, el hacinamiento, la vulnerabilidad ante eventos naturales y las limitaciones de crecimiento y equipamiento que tiene el hospital porteño.

Asimismo, el nuevo edificio contará con una construcción segura, amigable con el ambiente y contempla medidas de protección contra incendios y sismos, y que se ajustará a la normativa de Igualdad de Oportunidades a las Personas con discapacidad.

De igual manera será un Hospital Digital que contará con la implementación del Expediente Digital Único en Salud EDUS.

También se ofrecerán nuevas especialidades médicas, lo que incrementará la oferta de servicios de recibe las 275 935 personas adscritas actualmente a ese establecimiento de salud, fortaleciendo este hospital regional. 

Entre las nuevas especialidades destacan: cardiología, endocrinología, oncología médica, cirugía oncológica, gineco oncología, otorrinolaringología y radiología intervencionista y hemodinamia; además de las que el centro ya posee.

Por su parte, el doctor Rainier Chaves Solano, director regional de Red y Servicios de Salud de la Región Pacífico Central de la CCSS, comentó que, después del terremoto de 2012, el hospital Monseñor Sanabria pasó de tener un área de construcción de 26 500 m2 a solamente 2 500 m2.

Actualmente, gracias a una inversión de ¢11 654 millones, se ha rehabilitado un total de 20 733 m2 al servicio de la salud de la población porteña.

«La institución ha invertido para poner en marcha al hospital Monseñor Sanabria y, actualmente, está con todos sus servicios en funcionamiento; incluso, tenemos mejores servicios que antes del terremoto», dijo el doctor al citar la apertura del servicio de tomografía axial computadorizada, y que constituyó un incremento en la capacidad diagnóstica por imágenes, principalmente para pacientes con huesos fracturados, cánceres, coágulos de sangre, signos de enfermedad cardíaca y hemorragia internas; así como la incorporación, durante este año, de 14 médicos especialistas de servicio social.

El nuevo hospital se edificará bajo un modelo que busca que sea un hospital preparado para dar respuesta a los problemas de salud de la población según su capacidad resolutiva dentro de la red de servicios de salud, ambientalmente responsable, con posibilidades de crecimiento para la incorporación de nuevas tecnologías, que impulse las unidades multidisciplinarias con profesionales de distintas especialidades médicas y quirúrgicas, integrado en red con el resto de la estructura hospitalaria del país y enfocado en el paciente, en quien se priorizará la gestión por procesos y será el objetivo prioritario.