Redacción/Agencias – Según confirmó a la prensa rusa el portavoz de la Presidencia de Rusia, Dmitri Peskov, «el comandante supremo (Putin) efectuó el lanzamientos de cuatro misiles balísticos».
Entre ellos, el Ejército ruso probó exitosamente el temible RS-28 Sarmat, también conocido como «Satán 2», su misil nuclear que puede transportar en su cabeza 40 megatones y es 1.000 veces más poderoso que las bombas atómicas lanzadas sobre Hiroshima y Nagasaki en 1945.
Se considera el arma nuclear más poderosa del mundo, ya que tiene la capacidad de transportar hasta 16 bombas separadas y lanzarlas sobre una misma zona en el mismo ataque.
En mayo, el medio de noticias ruso Sputnik reportó que el misil es capaz de «destruir partes de la Tierra del tamaño de Francia o el estado de Texas», en Estados Unidos.
Además, «Satán 2» puede recorrer el trayecto Moscú-Londres (10 mil kilómetros, aproximadamente) en apenas 13 minutos.
Fue disparado desde el cosmódromo de Plestsek, situado en el noroeste de Rusia, e impactó en el polígono de Kurá, en el extremo oriente del país, cerca de Corea del Norte.
Putin también participó en unos ejercicios de coordinación de mandos que incluyeron también dos submarinos nucleares y varios aparatos de la aviación estratégica.
El Ministerio de Defensa de Rusia declaró que todas las misiones contempladas en el programa de ejercicios fueron cumplidas con éxito.