Redacción-La pérdida de audición, ya sea neurosensorial (oído interno) o mixta (oído medio e interno) podría aparecer en un mayor porcentaje en personas que padecen de anemia ferropénica, que consiste en una enfermedad producida por una deficiencia de hierro.

Los pacientes que la padecen por lo general presentan mucha fatiga, falta de aliento, mareos, náuseas e irritabilidad. Esta carencia de hierro se origina en el mayor de los casos por una pérdida de sangre, mala alimentación o incapacidad de absorver suficiente hierro de los alimentos.

La anemia es una afección en la cuál el cuerpo no cuenta con suficientes glóbulos rojos sanos, los cuáles le proporcionan el oxígeno a los tejidos corporales. En el caso de la anemia ferropénica esta ocurre cuando el cuerpo no tiene suficiente cantidad de hierro y es la más común de las anemias.

Según un estudio realizado por investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal de Pensilvania en Hershey (EE.UU.)  los adultos con anemia tienen un alto riesgo de sufrir una pérdida de su capacidad auditiva.

Para este estudio se analizó a más de 300.000 personas norteamericanas de entre 21 y 90 años, de los que un 43% eran hombres y la edad media era de 50 años. Entre ellos un 0,7% presentaba anemia por deficiencia de hierro y un 1,6% tenía una pérdida auditiva de tipo mixta.

Entre las conclusiones de este estudio están que descartando factores como edad y sexo, se reportó que la presencia de anemia ferropénica se asocia con un riesgo 1,82 veces mayor de pérdida auditiva neurosensorial (oído interno) y hasta 2,41 veces superior de pérdida auditiva mixta (afectación tanto de oído medio como oído interno).

Además de la anemia, el riesgo para las personas aumenta con la aparición de otras enfermedades que llevarían también a la pérdida de audición tales como la hipertensión arterial, diabetes y el consumo de medicamento ototoxicos (como la aspirina).

Como acción preventiva, quienes sufren deficiencia de hierro podrían mejorar su condición alimentándose con productos del mar como almejas, mejillones, ostras, ya que cada uno de estos productos contiene 7 mg de hierro por cada 100 mg.

Otra buena opción para aumentar los niveles de hierro en el cuerpo y evitar sufrir de pérdida de audición son las sardinas que contienen 4.8 mg y los cereales integrales que tienen entre 7 y 18 mg por cada 100gr.

“Es indispensable una evaluación auditiva ante la presencia de un diagnóstico por deficiencia de hierro, recomendamos hacerse un exámen cada seis meses para comparar los resultados”, expresó Carlos Pereira, audiologo de Clínicas de la Audición.

“La hipoacusia aun siendo por deficiencia de hierro es irreversible y progresiva. Una vez determinada, es recomendable el uso de prótesis auditivas para mantener estimulados los oídos por medio de una mejor amplificación y señal que llega al cerebro de lo que se está escuchando, y mejora la comunicación y que la persona se desenvuelva bien en su entorno”.