Redacción- El café es una de las bebidas más populares del mundo. Cada día se consumen más de 1.400 millones de tazas a nivel mundial, la mayoría durante el desayuno.

En el mercado existe gran variedad de tipos de café para todos los gustos, los cuales se pueden clasificar en dos categorías principales: café en grano y café soluble. Ambas opciones ofrecen beneficios y complacen el paladar de cada amante de esta bebida.

Según un estudio de Unimer para el Instituto de Café de Costa Rica (Icafé), en el país, 8,4 de cada 10 costarricenses son consumidores de esta bebida. Los datos indican que, cada día, los ticos beben alrededor de 4,8 millones de tazas de café.

Este comportamiento coloca a los costarricenses como los segundos en Latinoamérica que más café consumen al año, con un total de 525 tazas por persona, tan solo detrás de los brasileños, con 795 tazas, según Euromonitor International.

¿Cómo prefiere su café?

La forma de consumo depende principalmente del gusto y estilo de vida de cada persona, pues el consumidor es quien decide el tipo de café que utiliza para preparar su bebida y si prefiere agregarle leche, azúcar, edulcorante u otros ingredientes, como chocolate o canela.

A continuación, se destacan cuatro formas en que se comercializa el café actualmente:

Café en grano: quienes prefieren el café en grano necesitan de máquinas especiales para preparar una taza de esta bebida, pues es necesario moler los granos antes de realizar la infusión. De esta forma, se abre un mundo de posibilidades, ya que su sabor y textura varían según el tipo de máquina que se utilice, si el agua está fría o caliente y, por supuesto, la calidad del grano que se muela.

Café molido: esta es la forma más popular de consumo entre los amantes de esta bebida, pues conserva la esencia del grano y resulta más rápido y práctico de preparar. Además, suele tener un precio más económico comparado con el café en grano.

Café soluble: se caracteriza por su practicidad y variedad, ya que el consumidor solo necesita agua o leche caliente para disfrutar de forma inmediata de un tradicional café negro, o bien, de sabores tan apetecidos y variados como: cappuccino, latte, vainilla, cappuccino vanilla, moka y cappuccino moka.

Gracias a técnicas avanzadas en su proceso de secado, actualmente el consumidor puede obtener un café instantáneo, con mejor sabor, textura y olor.

Un informe de Euromonitor del 2014 señala que el 50% de la población mundial prefiere tomar café instantáneo, en lugar de café recién tostado.

Café en cápsulas: es una opción para consumo individual y de forma inmediata, que ofrece gran variedad de sabores, entre espressos, cappuccinos, chocolates, tés e, incluso, bebidas frías. Para disfrutar de un café en cápsula, es necesario disponer de una máquina especialmente diseñada para introducir el producto –se recomienda utilizar cápsulas de la misma marca de la máquina–. Luego, debe seleccionar la dosis de agua y pulsar el botón. De esta forma, en segundos, podrá disfrutar de su bebida favorita.

“Cualquiera de estas cuatro opciones complacerá los gustos de los amantes del café. Si usted es de los que aprecia más la preparación, textura y aroma del café, se inclinará por el café en grano; pero si usted prefiere la practicidad y variedad de sabores, sin duda, disfrutará más de un café soluble o en cápsula. Por eso, Nestlé ha ampliado su oferta de productos a través de marcas como NESCAFÉ y NESCAFÉ Dolce Gusto para ofrecer a los consumidores diversas opciones para deleitar su paladar”, afirmó  Kim Waigel, director de Café y Bebidas Nestlé en Centroamérica.

Aunque se inventó en 1901 por el japonés Sartori Kato, fue hasta 1938 que NESTLÉ® llevó el café soluble al público en general, gracias a su avanzado proceso de refinación del café.

Todo comenzó en 1930 cuando el gobierno de Brasil se puso en contacto con NESTLÉ® para encontrar una forma de conservar sus enormes excedentes de este producto.

Después de ocho años de investigación, nació el café soluble para revolucionar la industria a nivel mundial, con una bebida que se podía preparar solamente con añadir agua y que retenía los sabores naturales del café.

Fue el 1 de abril de 1938 cuando se presentó al mundo el café soluble. Un nuevo producto llamado NESCAFÉ®, una combinación entre NESTLÉ® y café.

Durante la Segunda Guerra Mundial se convirtió en la bebida clásica de las fuerzas armadas estadounidenses y, desde entonces, su popularidad tomó fuerza.

Ya son más de 75 años durante los cuales NESCAFÉ® ha sido pionero en el mundo del café y está presente, aproximadamente en 180 países. Cada día, se consumen un promedio de 5.500 tazas de NESCAFÉ®.

Hasta la fecha, la marca ha desarrollado alrededor de 5.000 productos diferentes, diseñados para satisfacer cada gusto, ocasión y presupuesto de los consumidores.