Redacción- El Gobierno de la República de Costa Rica, en su intervención ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), hizo un vehemente llamado al Gobierno de Nicaragua, a cesar la represión a los manifestantes, el uso excesivo e indiscriminado de la fuerza, así como las detenciones arbitrarias.

Costa Rica exhortó nuevamente a acatar las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ante las graves violaciones a las garantías individuales y colectivas, en el marco de las protestas sociales en ese país.

La Embajadora costarricense ante la OEA, Rita Hernández, reiteró el llamado al Gobierno de Nicaragua “para retomar el camino del diálogo comprometido, ordenado, transparente y urgente, que permita el retorno de la calma y la salida pacífica del conflicto interno”.

En el informe presentado este viernes al Consejo Permanente de la OEA, la CIDH evidenció un uso excesivo de la fuerza por parte de policía, grupos parapoliciales y grupos de terceros armados.

La CIDH contabiliza un total de 212 personas que han perdido la vida, así como 1.337 heridos y 507 detenidos de manera arbitraria.

“A pesar del llamado al cese inmediato a la represión estatal por la propia Comisión, esta no ha sido detenida. Por el contrario, la respuesta represiva ha recrudecido en las últimas semanas, acentuándose la crisis que afecta al país”, explica el informe.

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La Comisión concluye que el Estado de Nicaragua violó los derechos a la vida, a la integridad, salud, libertad personal, reunión, libertad de expresión y acceso a la justicia.

Costa Rica respalda contundentemente el trabajo de la CIDH y reitera su llamado a que todos los actos de violencia sean investigados de manera inmediata, con estricto apego a las normas y estándares internacionales para asegurar el derecho a la verdad. Se requiere voluntad para el diálogo y una hoja de ruta que permita una salida negociada de la crisis.

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