Paul Chaves C.
Profesor, Centro Formación Criminología y Segurida

Security College US, Costa Rica.


Henry Kissinger, quien fuera Secretario de Estado de Estados Unidos, decía con frecuencia “Vivimos en un mundo sin respuestas simples”. En 25 años en temas de seguridad si algo puedo decir que es cierto del tema es que nada es simple. A veces queremos soluciones mágicas a los problemas.

Y eso no es posible quizá en nada. Sólo un populista o un demagogo podría decir lo contrario. Por eso mismo, Michael Soto -el nuevo Ministro de Seguridad- acertadamente no ha cedido a la presión de prometer cosas irreales como que en Costa Rica van a disminuir la cantidad de homicidios.

Uno quisiera decir eso. Él sabe bien que existen múltiples factores que pesan en esto, por mucho que sean sus esfuerzos. Él sabe que los homicidios aumentarán en este año con respecto al año 2017. Él cree que rondarán los 630 o similar. Yo creo
que serán entre 650 y 700.

Pero a pesar de esos críticos números en seguridad, sí creo que tenemos un buen ministro, capaz, honesto y con conocimiento. ¿Por qué? Lo explicaré de forma sucinta.

1 – Geopolítica. ¿De dónde viene la droga (cocaína)? De Colombia. ¿Quiénes manejan su envío? El Cartel de los Soles en Venezuela. ¿Quiénes la reciben e ingresan a EE UU? El Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel de Sinaloa, en México, así como otros grupos. ¿Qué podemos hacer nosotros para controlar lo que pasa en esos países? Nada.

2. – País en quiebra. No hay plata. Para nada. El Ministerio de Seguridad tiene un déficit de dinero del orden de 5.000 millones de colones. Los nuevos policías no significa la solución del déficit policial.

3.- Menos ayuda internacional. A Trump no le interesa América Latina. Le importa Corea del Norte, Rusia, China. Europa tiene una crisis de refugiados. Y Trump, además, se peleó con ellos. ¿A quién le pedimos ayuda entonces?

4- Crisis en Nicaragua. Para dónde huirán miles de nicaragüenses si eso empeora o llega a una guerra civil? Pues no a El Salvador, Guatemala o Honduras. Vendrán a Costa Rica.

5.- Todos son expertos. Siempre habrá críticos de todo. Es parte de ser de Costa Rica. Todos son expertos en seguridad en Costa Rica. Todos opinan sobre lo que hay que hacer. Y al que hace, lo critican. Con las redes sociales ni qué decir. Como dijo Umberto Eco: “las redes sociales le abrieron la puerta a los idiotas para opinar de todo”.

Todo lo dicho puede sonar a derrotismo. No es así. Es ser realista y honesto. Así hay que trabajar en seguridad.

Michael Soto está haciendo lo correcto. Usa lo que tiene. Tiene datos del delito y ha armado un equipo de gente motivada para sacar la tarea.

Los “Megaoperativos” no son una pomada canaria. A los “Megaoperativos” hay que darles tiempo y entender bien sus objetivos.

Dos puntos de los megaoperativos son claves: el decomiso de armas y la captura de sujetos con cuentas con la justicia. El impacto del decomiso de droga es a mi juicio menor. Las drogas son más abundantes,y su flujo es constante. Fácil se sustituyen las drogas capturadas. Armas y capturas impactarán más. Ahí hay que apostar.

Digo esto también de similares ideas que se nos presentan como soluciones mágicas: la ley de extinción de dominio, “la prevención” o similares. Todo esto también tiene sus bemoles. Me referiré a estos otros temas en futuros artículos. En seguridad vivimos en un mundo sin respuestas simples. Dejen trabajar al Ministro Soto y a su equipo.