Redacción/Agencias- El huracán Michael dejó al menos 17 muertos en Estados Unidos y casi 900 mil clientes permanecen hoy sin electricidad, mientras en las áreas más afectadas los residentes hacen largas filas para recibir agua y comida.

Los decesos confirmados como consecuencia del organismo ciclónico que tocó tierra el pasado miércoles en el Panhandle de Florida con vientos máximos sostenidos de 250 kilómetros por hora incluyen ocho en ese estado, cinco en Virginia, tres en Carolina del Norte y uno en Georgia.

El último fallecimiento reportado corresponde a un hombre cuyo cuerpo hallaron rescatistas ayer entre los escombros en Mexico Beach, una de las áreas más devastadas por la tormenta que entró a Estados Unidos con categoría cuatro en la escala Saffir-Simpson, de un máximo de cinco.

William Long, administrador de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, indicó que el número de muertes podría aumentar a medida que los equipos de búsqueda y rescate avancen en las partes más afectadas de México Beach, Port St. Joe y Panama City.

Oficiales de emergencias dijeron que recibieron miles de llamadas sobre desaparecidos, pero debido a la ausencia de telefonía celular en una amplia zona, les resultó imposible saber cuántos casos en realidad corresponden a personas que no podían comunicarse con sus familiares.

De acuerdo con la televisora CNN, tres días después del azote del meteoro los residentes de algunos de los lugares más golpeados se están desesperando por la comida y el agua.

Largas filas se formaron fuera de las estaciones de bomberos, las escuelas y los camiones del Ejército de Salvación, mientras las personas intentan asegurar cualquier cosa, desde agua embotellada y comidas listas hasta alimentos calientes, describió el medio esta mañana.

Millones de comidas y galones de agua se dirigen a las comunidades afectadas, escribió hoy en Twitter el gobernador de Florida, el republicano Rick Scott.

Durante esta jornada las cuadrillas de emergencia continuarán descendiendo hacia las ciudades costeras del Panhandle e intentarán llegar a áreas remotas que quedaron aisladas por árboles derribados y postes de energía.

Con información de la Agencia de Noticias Prensa Latina.