Redacción- El hombre sospechoso de secuestrar a un niño de 2 años el pasado jueves en Pozos de Santa Ana solía visitar con frecuencia Costa Rica.

Desde el año 2012, el francés de apellido Mirc, había llegado  a suelo nacional en 13 oportunidades, según un registro migratorio que obtuvo AM Prensa de una fuente confidencial.

El primer ingreso que Mirc hizo en ese año fue en el mes de marzo, por el Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, misma terminal por la que abandonó el país.

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La siguiente llegada del sospechoso a Costa Rica fue tan solo un mes después, el 28 de abril de 2012, permaneció dos meses en territorio nacional y se fue el 13 de junio del mismo año.

A partir de ahí, el hombre registra más ingresos y salidas, no solamente por el Aeropuerto, sino que también por la zona fronteriza con Nicaragua de Peñas Blancas.

Al parecer, esas veces que Mirc entró y abandonó Costa Rica por la frontera norte se debieron a que se le vencía la visa de turista -la cuales otorgada por tres meses-.

Así quedó el carro en el que viajaban los sospechosos.

Luego de estar unos días en Nicaragua, el francés volvía al país por la misma frontera, las veces que lo hizo estuvo en suelo nicaragüense por al menos cuatro días.

 El último ingreso que registró el sospechoso antes de ser arrestado fue el pasado 1o de octubre de 2018, de igual forma que su primer llegada: por el Aeropuerto Internacional Juan Santamaría.

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Por otra parte, la mujer que fue capturada junto a Mirc, una nicaragüense apellidada Oporta, tenía residencia permanente en Costa Rica y, al parecer, era vecina de Cartago.

A ambos sospechosos, se les dictó la medida cautelar de prisión preventiva por un periodo de tres meses mientras las autoridades investigan los hechos.

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