Redacción- ¿Es de bajos recursos y tiene una actividad productiva? Le contamos que puede optar por un financiamiento de Fideimas con tasas favorables que va entre un 4% y 6%.

Esta gestión se realiza a través de operadores de crédito nacionales, entre los que se encuentran entidades financieras del Estado, organizaciones microfinancierassin fines de lucro y cooperativas de ahorro y crédito.

De forma complementaria, FIDEIMAS brinda acompañamiento y capacitaciones en temas diversos como estrategias de comercialización y marketing, planes de negocios, acceso al crédito, o ciclo de vida del producto, cursos que son requisito para ser parte del programa. Durante el 2018 se capacitó a 1130 personas emprendedoras en todo el país, con una inversión social superior a los ₡161 millones.

“Este modelo es un instrumento valioso para nuestra población, no solo porque les facilitaos un crédito para impulsar su actividad, también por la transferencia de conocimientos para que las personas beneficiarias desarrollen y consoliden un negocio que les genera su propio trabajo y con ello logren superar el círculo de pobreza”, dijo la Ministra de Desarrollo Humano e Inclusión Social, y Presidenta Ejecutiva del IMAS, María Fullmen Salazar.

FIDEIMAS se creó en el 2004 con la Ley 7769, de Atención a la Mujer en Condición de Pobreza y busca apoyar especialmente a mujeres o familias en dicha condición. Desde su creación a la fecha, se han apoyado 6.937 emprendimientos, que representan una inversión de 12.003 millones de colones.

Los requisitos para optar por el financiamiento del Fideimas son:

1- Contar con el estudio socio económico del IMAS.

2- Tener un emprendimiento productivo con más de 6 meses en funcionamiento.

3- Tener su historial crediticio limpio.

Las personas interesadas en ser parte de este programa pueden enviar un whatsapp 83660469 ó al 83626319 o solicitar información en las oficinas regionales del IMAS ubicadas en todo el país.

El Fideicomiso del IMAS (FIDEIMAS), colocó 707 operaciones crediticias durante el 2018, 124 más que en el 2017, lo que representó una inversión de ₡1386 millones. Se trata de recursos gestionados por personas en condición de pobreza y que cuentan con una actividad productiva.