• Brindó discurso desde la India en honor a su padre

Redacción – “Si don Pepe estuviera con nosotros hoy, también nos estaría explicando que la paz no se mantiene si no logramos trabajar y prosperar en armonía con la naturaleza”, reflexionó Christiana Figueres en un sentido mensaje enviado desde la India, cuyo eje central fue la figura emblemática y visionaria de su padre.

El video fue reproducido luego de que el presidente de la República, Carlos Alvarado Quesada, anunciara la condecoración al Mérito de la Paz y de la Democracia a Christiana Figueres Olsen, en acto oficial de celebración del 70 aniversario de la Abolición del Ejército en el Museo Nacional.

El presidente Alvarado condecoró a Christiana Figueres por sus aportes al planeta reflejados en su labor como Secretaria Ejecutiva de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático y los logros alcanzados en el acuerdo global de lucha contra el cambio climático – Acuerdo París – del 2015.

En el mensaje, Figueres dio un respaldo inequívoco al gobierno en su plan de descarbonización de la economía, mediante el cual se plantea como reto abolir el uso de combustibles fósiles.

“Ese agricultor nos estaría afirmando que no tenemos que escoger entre desarrollo y medio ambiente, ya que solo tendremos verdadero desarrollo si éste es sostenible. Ese diseñador de plantas hidroeléctricas nos estaría demostrando que la descarbonización de la economía aunque compleja no es un sacrificio, sino la oportunidad de optimizar la eficiencia de todos nuestros recursos, financieros y naturales”, dijo.

Esta condecoración se otorga como un reconocimiento que rinde la Presidencia de la República a aquellas personas que por sus actuaciones sirvan de ejemplo de compromiso con los valores y principios de la paz y la democracia.

“En ese entendimiento, y con la visión que caracteriza a nuestro país, es tiempo de dar los primeros pasos hacia una economía libre de la costosa importación de combustibles fósiles, que tan negativamente afectan tanto la cartera del Estado como la salud de los costarricenses”, abogó.

Señaló que fue gracias a la abolición del ejército que, a diferencia de muchas otras naciones, “en Costa Rica hoy no defendemos esa paz y esa democracia con las armas, sino con el derecho internacional y con las banderas del desarrollo económico, la justicia social, y la educación”.

“Bajo la tutela de don Pepe aprendimos que la democracia no es solamente la participación en los procesos electorales, sino el diario cometido al profundo respeto mutuo. Aprendimos que la paz no es solamente la ausencia del conflicto, sino el diario cometido al bien común”.

Durante su intervención, contó una anécdota cuando tenía nueve años y acompañó a su padre en una entrevista y al finalizar, el reportero le preguntó: “don Pepe, y usted cuántos hijos tiene?”.

“Sin titubear ni un segundo don Pepe respondió: ‘Millón y medio’.  Si bien su respuesta dejó perpleja a la niña de aquel entonces, algunos años después entendí el amor de mi padre por cada uno de los ciudadanos costarricenses”, recordó emocionada.

“Señor Presidente, con sumo agradecimiento hoy recibo este reconocimiento en honor a Don Pepe, y a nombre no de una hija, sino a nombre de sus hoy casi cinco millones de hijos costarricenses”, dijo Figueres.

Y finalizó diciendo: “Por eso, como nación hoy nos corresponde, y nos urge, permanecer más fuertemente unidos por nuestras raíces comunes, que separados por diferencias de opinión; nos corresponde y nos urge recuperar el respeto mutuo en el debate político, reconociendo que el fin último de ese diálogo debe ser siempre la consecución del bien común”.