Papa Francisco en centro El Buen Samaritano.
  • Joven sueña con cambiar el destino «de su gente» con su testimonio 

Redacción- Este domingo, el Papa Francisco visitó la casa hogar «El Buen Samaritano» en Panamá donde se reunió con Raúl Tugrí, un joven que sufre de VIH Sida.

Su santidad conoció la historia del joven, quien, a pesar de saber que los índices de la enfermedad son altos, sueña con ir a su tierra a hablarle a su gente sobre la enfermedad, para que tomen las precauciones necesarias y no cometan los mismos errores que él cometió.

“Al principio es duro cuando uno tiene sueños y metas por cumplir y al descubrir la enfermedad uno se siente estancado, siente que ahí queda todo. Pero cuando llegas aquí y conoces a todas las personas que tienen la misma enfermedad y a otros que te atienden o que nos visitan, sin ningún tipo de rechazo, comienzas a entender que Dios te está dando una segunda oportunidad”, contó Raúl.

Tugrí estuvo un año en cama sin poder caminar y con mucho empeño ya puede hacerlo con andadera. Aseguró que se levantará de la silla de ruedas y retomará poco a poco su vida. Pero esta vez, contó, teniendo el control en sus manos y no dejándose llevar por falsos placeres.

Al recibir la noticia sobre su padecimiento, Raúl se sintió confundido porque no sabía mucho sobre el VIH. El miedo al rechazo se apoderó de su ser y muchas ideas lo llevaron a caer en depresión.


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Sin embargo, encontró en el Buen Samaritano, el apoyo que necesitaba para salir adelante y hacerle frente a su enfermedad.

La Casa Hogar el Buen Samaritano es un centro de acogida para personas con VIH-Sida. El hogar se ubica en un espacio físico que da acogida a diez varones y cinco mujeres sin distinción de sexo, religión u orientación sexual, procedencia geográfica o recursos, con el objetivo de darles un acompañamiento integral por un espacio de tiempo determinado según la condición física y anímica de cada individuo.

Su santidad visitó el centro y en su discurso destacó la gran labor de la institución, a la cual instó a seguir brindando la ayuda dada hasta la fecha.

«Gracias a todos ustedes por el ejemplo y generosidad; gracias a sus Instituciones, a los voluntarios y a los bienhechores. Gracias a cuantos hacen posible que el amor de Dios se haga cada vez más concreto y real, mirando a los ojos de los que están a nuestro alrededor y reconociéndonos como prójimos», dijo el Papa.

Asimismo, dirigió un emotivo mensaje a los pacientes del centro:

«Los invito ahora a poner bajo su manto todas sus inquietudes y necesidades, aquellos dolores que llevan, las heridas que padecen, para que, como Buena Samaritana, venga a nosotros y nos auxilie con su maternidad, con su ternura, con su sonrisa de Madre».

AM Prensa fue el único medio costarricense que asistió al evento y logró captar estos momentos en fotografías: