Redacción- En el marco del “Día Internacional de la Mujer”, designado el 08 de marzo, por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la más reciente investigación de Mujeres Directivas realizada por Grant Thornton International, da cuenta que el porcentaje de empresas en todo el mundo con al menos una mujer en la alta dirección subió a 87%, un aumento del 12% durante el último año.

En total, las mujeres ocupan ahora el 29% de los cargos de liderazgo senior a nivel mundial. Si bien esto representa sólo un aumento del 10% en los últimos 15 años de investigación, la mitad de este aumento (5%) ocurrió apenas en los últimos 12 meses.

Francesca Lagerberg, líder global de Grant Thornton International, comentó: “Estas cifras son increíblemente alentadoras y un fuerte indicio de que las empresas están empezando a tomar en serio la paridad de género. Los factores externos, como el aumento de la transparencia organizacional, los reportes sobre la brecha salarial de género y el diálogo público con gran visibilidad como el movimiento #MeToo, parecieran estar generando que las empresas se den cuenta del cambio que se necesita”.

Si bien el número de mujeres en la alta dirección se incrementa, todavía la paridad de género está muy lejos de alcanzarse. Cuando se trata del rol de CEO o director general, solo el 15% de las empresas a nivel mundial tienen una mujer que lidera el negocio.

German Morales, Socio Director de Grant Thornton-Costa Rica,  afirmó que para  seguir  aumentando la  representación femenina en  cargos gerenciales, las empresas deben tomar  decisiones claras, certeras y comprometidas.  Además, para lograr un progreso significativo, se deben revisar constantemente las políticas tendientes a lograr la igualdad de oportunidades en el desarrollo profesional,  así como los sesgos en reclutamiento y el trabajo flexible  para evaluar su efectividad.

Panorama regional

El reporte de Grant Thornton Internacional  en 2019 revela marcadas diferencias en la diversidad de género en el ámbito de la alta dirección, a menudo enraizadas en factores culturales, económicos y políticos específicos de cada país. Europa del Este está a la vanguardia con casi un tercio (32%) de la alta dirección compuesta por mujeres en la región, superando la cifra global en tres puntos porcentuales. Por el contrario, América Latina tiene la cifra más baja, con sólo el 25% de los gerentes senior que son mujeres; mientras que la UE, Asia Pacífico (APAC) y América del Norte, entre otros, no logran un movimiento significativo en el terreno intermedio.

Europa del  Este  ha ofrecido oportunidades para que las mujeres adquieran habilidades técnicas y se muevan hacia industrias dominadas por hombres, con muchas mujeres líderes en el lugar de trabajo. Las políticas gubernamentales dirigidas al pleno empleo y al emprendedorismo también han inspirado y apoyado a las mujeres.

Mientras tanto, el reporte Perspectivas sobre diversidad: género, edad y etnia 2018 mostró a las empresas africanas liderando el camino tanto en la priorización como en la adopción de medidas sobre la diversidad de género. En las entrevistas llevadas a cabo por McKinsey & Company1, 35 mujeres líderes empresariales identificaron una ética de trabajo universal y sólida porque “sentían que tenían que trabajar el doble que sus compañeros hombres”.

Al mismo tiempo, la tecnología para efectuar pagos con teléfonos celulares ha ayudado a las propietarias de negocios, especialmente en áreas rurales, al abrir el acceso a los servicios financieros.

En el marco del “Día Internacional de la Mujer”, designado el 08 de marzo, por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la más reciente investigación de Mujeres Directivas realizada por Grant Thornton International, da cuenta que el porcentaje de empresas en todo el mundo con al menos una mujer en la alta dirección subió a 87%, un aumento del 12% durante el último año.

En total, las mujeres ocupan ahora el 29% de los cargos de liderazgo senior a nivel mundial. Si bien esto representa sólo un aumento del 10% en los últimos 15 años de investigación, la mitad de este aumento (5%) ocurrió apenas en los últimos 12 meses.

Francesca Lagerberg, líder global de Grant Thornton International, comentó: “Estas cifras son increíblemente alentadoras y un fuerte indicio de que las empresas están empezando a tomar en serio la paridad de género. Los factores externos, como el aumento de la transparencia organizacional, los reportes sobre la brecha salarial de género y el diálogo público con gran visibilidad como el movimiento #MeToo, parecieran estar generando que las empresas se den cuenta del cambio que se necesita”.

Si bien el número de mujeres en la alta dirección se incrementa, todavía la paridad de género está muy lejos de alcanzarse. Cuando se trata del rol de CEO o director general, solo el 15% de las empresas a nivel mundial tienen una mujer que lidera el negocio.

German Morales, Socio Director de Grant Thornton-Costa Rica,  afirmó que para  seguir  aumentando la  representación femenina en  cargos gerenciales, las empresas deben tomar  decisiones claras, certeras y comprometidas.  Además, para lograr un progreso significativo, se deben revisar constantemente las políticas tendientes a lograr la igualdad de oportunidades en el desarrollo profesional,  así como los sesgos en reclutamiento y el trabajo flexible  para evaluar su efectividad.

Panorama regional

El reporte de Grant Thornton Internacional  en 2019 revela marcadas diferencias en la diversidad de género en el ámbito de la alta dirección, a menudo enraizadas en factores culturales, económicos y políticos específicos de cada país.

Europa del Este está a la vanguardia con casi un tercio (32%) de la alta dirección compuesta por mujeres en la región, superando la cifra global en tres puntos porcentuales. Por el contrario, América Latina tiene la cifra más baja, con sólo el 25% de los gerentes senior que son mujeres; mientras que la UE, Asia Pacífico (APAC) y América del Norte, entre otros, no logran un movimiento significativo en el terreno intermedio.

Europa del  Este  ha ofrecido oportunidades para que las mujeres adquieran habilidades técnicas y se muevan hacia industrias dominadas por hombres, con muchas mujeres líderes en el lugar de trabajo. Las políticas gubernamentales dirigidas al pleno empleo y al emprendedorismo también han inspirado y apoyado a las mujeres.

Mientras tanto, el reporte Perspectivas sobre diversidad: género, edad y etnia 2018 mostró a las empresas africanas liderando el camino tanto en la priorización como en la adopción de medidas sobre la diversidad de género. En las entrevistas llevadas a cabo por McKinsey & Company1, 35 mujeres líderes empresariales identificaron una ética de trabajo universal y sólida porque “sentían que tenían que trabajar el doble que sus compañeros hombres”.

Al mismo tiempo, la tecnología para efectuar pagos con teléfonos celulares ha ayudado a las propietarias de negocios, especialmente en áreas rurales, al abrir el acceso a los servicios financieros.