Redacción- Una foto de un enorme perro-lobo de 1,65 metros de altura que se encuentra en una reserva de animales situada en Naples se ha vuelto viral en las redes sociales de Estados Unidos.
El perro, “Yuki”, de ocho meses de edad, iba a ser sacrificado después de que detectaran un tumor a su dueño, quien no podía hacerse cargo del animal debido a su gran tamaño.
Pero “Yuki”, 87,5 % de lobo gris, 8,6 % de Husky siberiano y 3,9 % de pastor alemán, fue recogido finalmente en 2018 en el centro Shy Wolf Sanctuary, un hogar y santuario para lobos y perros-lobo que acoge también a animales heridos y rescatados como pumas, linces y tortugas.
Desde entonces, “Yuki” se ha convertido en la mayor atracción del santuario para lobos desde que Brittany Allen, voluntaria del centro, subió a las redes sociales varias fotografías junto al gigantesco perro.