Foto: Fines ilustrativos.
  • En febrero, una familia de franceses estaba contagiada

Redacción – Cuatro nuevos casos sospechosos de sarampión se presentan en Costa Rica. Se trata de niños con edades de 3 a 10 años, hijos de ciudadanos estadounidenses residentes en Cóbano, Puntarenas. Los padres de los menores no vacunaron a los niños y además no les tienen insertos dentro del sistema educativo costarricense.

Según la investigación preliminar, los menores se pudieron haber contagiado por una estadounidense que los visitó, pues presentaba síntomas de sarampión. La turista ya abandonó el país.

Los niños que fueron atendidos en la Clínica de Cóbano de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), presentan fiebre desde el pasado 15 de marzo y brotes en la piel desde el 18 del mismo mes. Los casos se consideran como altamente sospechosos por su presentación clínica.

Ante dicha situación, el Ministerio de Salud, en conjunto con la CCSS, activó el protocolo establecido y se están realizando las siguientes acciones:

  1. Aislamiento, atención y seguimiento domiciliar para los once miembros de la familia (padre, madre y nueve niños, de los cuales cuatro son lo que presentan cuadro sospechoso de sarampión).
  2. Toma de muestras y envío a INCIENSA para el respectivo análisis.
  3. Investigación de campo para indagar posibles contactos en la localidad de residencia de los casos, revisión de esquemas de vacunación y aplicación de la vacuna en los casos que se requiera.

Las autoridades de salud reiteran a la población la necesidad de que los encargados de menores velen para que los niños tengan el esquema de vacunación completo (dos dosis para el caso del sarampión, al año y tres meses y al ingreso a la escuela).


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Además, solicitan acudir a los servicios de salud más cercanos si presenta síntomas de sarampión (fiebre, congestión nasal, tos, conjuntivitis, brote en piel que empieza en la cabeza y se expande por el cuerpo hacia los pies, alcanzando las caderas alrededor del segundo día).

El sarampión se transmite por gotas de saliva principalmente por medio de tos y estornudos a aquellos individuos que no hayan recibido inmunización.

El último caso importado de sarampión que se presentó en nuestro país fue en febrero pasado cuando una familia francesa llegó a suelo costarricense con el virus. Los tres miembros de la familia (el niño y los padres) no contaban con el esquema completo de vacunación contra el sarampión.

Salud aclara que no existe relación epidemiológica entre estos nuevos cuatro casos sospechosos y los últimos casos importados. Mientras exista transmisión a nivel internacional del virus, existe alto riesgo de enfermar de sarampión.

Costa Rica no presenta casos autóctonos de sarampión desde el 2006.