• Caso está siendo investigado

Redacción- Tras un vídeo que circuló en redes sociales en el que un estudiante del Liceo Monseñor Rubén Odio, en Desamparados, sostiene y apunta a uno de sus compañeros con una supuesta arma de fuego, el centro educativo activó un protocolo de actuación en situaciones de hallazgo, tenencia y uso de armas.

Según indicó el Ministerio de Educación Pública (MEP) desde el pasado 24 de abril, en ese centro de estudio se puso en marcha el protocolo.

Ana Cecilia Domián, supervisora del circuito 07 de Desamparados, indicó que se han establecido una serie de medidas preventivas y de atención de esta problemática.

«Realizamos las coordinaciones respectivas con las instituciones, según detalla el protocolo del Ministerio de Educación Pública (MEP). Además, coordinamos charlas de prevención de violencia y consumo de drogas, en beneficio de la población estudiantil. Buscamos instaurar una cultura de paz en la comunidad educativa, no solo de este centro educativo sino en todos los de la región», señaló Domián.

De acuerdo con los datos del Departamento de Análisis estadístico del MEP, en el 2018, se decomisaron 6 armas de fuego y 222 armas blancas en centros educativos en el país, y en el 2017 se decomisaron 16 armas de fuego a estudiantes y 327 armas blancas.


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Según Katia Grosser, directora de Vida estudiantil del MEP, es necesario que ante un evento como el que se aprecia en el vídeo, los directores de cada centro educativo activen los protocolos de atención correspondientes.

«En este vídeo se ve que los estudiantes están con una actitud de juego y en este caso el protocolo lo que establece es que se restaure la convivencia, restablecer la seguridad, que ellos se den cuenta que se ponen en riesgo.

El reglamento de evaluación establece que ingresar un arma a un centro educativo es una falta gravísima y tiene las sanciones para esos casos. A nosotros nos interesan las medidas correctivas que se encaminen a reparar el daño ejecutado.

Si alguna de las acciones que se detectan son o ameritan ser catalogadas como un delito se refiere a la fiscalía para que haga las investigaciones necesarias. Hay que recordar que en todo momento se resguarda el interés superior del menor», indicó Grosser.

Pese a que aún se desconoce si el arma que porta el estudiante es real, el caso está siendo investigado.