• Alianza público-privada impulsa un plan educativo 

Redacción- Al tiempo que aprenden el alfabeto los escolares costarricenses asimilarán en la escuela la importancia de cuidarse la piel y de protegerse de la radiación solar haciendo actividades lúdicas como pintar, resolver laberintos y sopas de letras.

La iniciativa forma parte de la campaña interinstitucional “Cuido mi piel…porque es la única que tengo”, que dio su banderazo de salida, esta mañana, en la escuela Mauro Fernández, en San José y contó con la participación conjunta de autoridades de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), de los Ministerios de Salud y de Educación, de la Municipalidad de San José y de la Fundación “Sol Seguro”.

Durante el encuentro el doctor Mario Felipe Ruiz Cubillo, gerente médico de la institución, manifestó su complacencia por la creación de este tipo de iniciativas que promueven la educación y la sensibilización desde edades tempranas, como una valiosa estrategia que busca fomentar el autocuidado como un factor determinante en la búsqueda y el éxito de cara a un envejecimiento cada vez más saludable.

Por su parte, Xenia Sancho, médica de la Coordinación Técnica del Cáncer de la CCSS, aseguró que la consecución de este logro permitirá educar a los niños sobre los riesgos de la sobreexposición solar, mediante estrategias amigables fuera de escenarios convencionales que aspiran, además lograr la incorporación de diferentes actores, entre ellos, educadores, con el propósito de generar un efecto multiplicador en los hogares, mediante el mensaje que lleven los niños, así como la posibilidad de extenderlo hacia otros centros educativos.


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El enfoque educativo y de entretenimiento en salud es una novedosa propuesta de trabajo de un grupo de profesionales de diversas instituciones  que han desarrollado lecciones especiales con dinámicas de entretenimiento para sensibilizar a los infantes y sus familias.

La educación para la salud se basa en la promoción de estilos de vida saludable para evitar la enfermedad, en este caso se trata del cáncer de piel, uno de los más comunes en el país y que está relacionado con la sobreexposición a la radiación ultravioleta.

Según la literatura médica si hay sobre exposición a la radiación solar en la infancia es posible que un adolescente llegue a los 18 años con la cantidad de radiación que debió haber tenido durante toda la vida para poder tener una piel sana.

Además los niños aprenden que las quemaduras del sol son dolorosas en el corto plazo y aumentan el riesgo de cáncer de piel a largo plazo. Las investigaciones dicen que cuatro quemadas de sol fuertes cuando es menor de edad elevan el doble del riesgo de cáncer de piel cuando llegue a ser adulto.

Es por eso por lo que en la escuela aprenden a gestionar los dos beneficios: disfrutar de la actividad física al aire libre para el desarrollo físico y la salud mental sin provocar sobre exposición al sol, porque el efecto de la radiación solar en la piel es acumulativo.

El clase “Cuido mi piel, es la única que tengo” que  se inauguró en la Escuela Mauro Fernández esta mañana, será impartida, en una primera instancia, a los 810 estudiantes del primer ciclo de educación primaria de cuatro escuelas del Área Metropolitana de San José:  Mauro Fernández, República de Nicaragua, Omar Dengo y Rafael Francisco Osejo.

La unión de esfuerzos institucionales y profesionales hicieron posible una metodología para promover la protección solar responsable desde el primer ciclo de educación primaria.

El proyecto pretende que el alumno y su familia sean conscientes del cuidado de la piel y de los efectos nocivos del sol en la salud de las personas para que adquieran actitudes y hábitos para el cuidado de la piel frente a la radiación solar a lo largo de la vida.

La metodología consiste en la implementación en el primer ciclo de educación primaria de un cuaderno de actividades para el alumno y una guía didáctica para los profesores. El cuaderno es una adaptación de los materiales del «Programa SolSano», del Gobierno de Aragón, en España.

Adicionalmente, uno de los objetivos específicos del proyecto es brindar a los niños y niñas gorras con visera larga para la protección del rostro y solapa que cubra del sol las orejas y el cuello  hasta el nivel de la clavícula  para que sean utilizadas en el escenario escolar y comunitario.

Este proyecto es un esfuerzo interinstitucional. Desde el año 2017 se constituyó una comisión compuesta por representantes del Ministerio de Educación Pública, Ministerio de Salud, la Caja Costarricense del Seguro Social, la Municipalidad de San José y la Asociación Cáncer de Piel.

Luego de esa primera experiencia en las escuelas, la clase se extenderá a otras escuelas hasta alcanzar a todos los niños del país.

Los socios se reunieron en sesiones de trabajo en la Vice alcaldía Primera de la Municipalidad de San José, para elaborar el Proyecto “Cuido mi piel, es la única que tengo”.  Como parte del proceso se logró construir el proyecto; lo sometieron a las respectivas entidades y todas dieron su aval para desarrollarlo.

El objetivo educativo en salud es reducir riesgo del cáncer de piel, así como de otras enfermedades y accidentes asociados a la exposición solar, aumentando a nivel individual y familiar conductas de protección de los rayos ultravioleta, mediante la implementación de una estrategia de información y educación, que organice y planifique las acciones dirigidas a la comunidad educativa.