La huelga de la Caja duró ocho días y el Gobierno llegó a un acuerdo con los sindicatos. Foto: Cortesía Undeca/AMPrensa.com

Redacción.  Dejar de cumplir a cabalidad con la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas envía una pésima señal a las calificadoras de riesgo, a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico y a los organismos multilaterales, aseguró el presidente de la Cámara Costarricense – Norteamericana de Comercio (AmCham), Elías Soley.

De acuerdo con la agrupación el acuerdo firmado entre la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) y algunos sindicatos de salud es contrario al esfuerzo y compromiso que solicitó el Presidente de la República de todos los costarricenses, sin excepción.


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Además, es una comprometedora señal que atenta contra la salud fiscal del Estado y abre un portillo para que otras instituciones públicas, valiéndose de una malentendida autonomía, se adhieran a la rebeldía y busquen quedar excluidas de las disposiciones de la normativa fiscal recientemente aprobada, especialmente en lo que se refiere el Título III de la Ley relacionado con los salarios del sector público.

“Con estas acciones no le podemos pedir al ciudadano que tenga confianza y credibilidad en sus autoridades. El Gobierno debe ser consecuente con sus actos, respetar a los sectores y ciudadanos responsables que aceptamos la reforma fiscal, así como a los empleados y empresarios que mes a mes contribuyen a la Caja Costarricense del Seguro Social”, dijo Soley. 

AmCham hace un llamado al Gobierno para que exijan a los jerarcas de las instituciones públicas mantenerse alineados y que cumplan a cabalidad con el pacto fiscal al que se comprometió, respetando el Estado de Derecho, en que se ha fundado la vida social y política de Costa Rica.