• Con norma propuesta por la Aresep

Redacción- Una propuesta para medir la calidad del servicio que brindan los buses y taxis en el país busca que los mismos usuarios brinden su criterio evaluativo.

Se trata de una norma que sería inicialmente de carácter voluntario con el objetivo de promover la mejora de los servicios de transporte.

Esta normativa aplicaría para las modalidades: autobús, taxi, ferrocarril y cabotaje (ferry, lanchas).

La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) es la entidad que promueve la implementación de esta norma de calidad europea.

La ARESEP realizó una investigación de buenas prácticas internacionales aplicables a los servicios de transporte público del país, y determinó que la mejor referencia para Costa Rica es la norma europea EN-13816 llamada, Calidad de servicio en transporte público de pasajeros. 

Esta norma incluye una serie de criterios de calidad como: servicio ofertado, accesibilidad, información, tiempo, atención al usuario, comodidad, seguridad e impacto medioambiental, entre otros. Las mediciones se realizarían por usuario incógnito y encuestas de satisfacción.


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El Regulador General, Roberto Jiménez, señaló que la única forma de medir la calidad es por medio de la percepción de los usuarios.

«La ciudadanía espera que se mejoren los servicios de transporte, pero la única manera de hacerlo es que se mida la calidad en la prestación del servicio y se considere la percepción de quienes los usan», dijo Jimenez.

La Autoridad Reguladora coordinó con el Instituto de Normas Técnicas de Costa Rica (INTECO) en noviembre de 2018 para homologar esta norma en el país.

La norma de calidad para el transporte público será sometida a consulta pública el 29 de noviembre de este año.

En caso de que la norma sea aprobada por el Comité Técnico, se constituirá en una norma nacional de carácter voluntario y que podrá ser adoptada por cualquier prestador de servicio de transporte público.

Asimismo, corresponderá al ente rector de cada servicio y la Autoridad Reguladora definir las etapas, actividades y plazos para que, de manera paulatina y ordenada, la norma pueda llegar a ser vinculante en el sistema de transporte público costarricense.