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Redaccion- Hace un año, se destinó el 7 de junio como el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos, con el objetivo de fortalecer los esfuerzos realizados para garantizar que los alimentos consumidos sean inocuos.

Según explica Priscilla Leiva, Coordinadora de Inocuidad Alimentaria de Auto Mercado, la inocuidad alimentaria es la garantía de que un alimento no causará un daño al consumirse.

Los alimentos inocuos son fundamentales para la promoción de la salud y la erradicación del hambre, dos de los 17 objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

Sin embargo, es un tema que suele ser invisibilizado, hasta que se sufre una intoxicación alimentaria. Los alimentos nocivos -que contienen bacterias, virus, parásitos o sustancias químicas perjudiciales- causan más de 200 enfermedades, desde diarreas hasta cáncer.

Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) arrojan que cada año, se enferman unas 600 millones de personas en el mundo, por consumir alimentados contaminados.

Pero además, en países de ingresos bajos y medianos se pierden cada año US$110.000
millones en productividad y gastos médicos a causa de alimentos insalubres.

Las infecciones diarreicas, que son las más comúnmente asociadas al consumo de
alimentos contaminados, hacen enfermar cada año a unos 550 millones de personas y
provocan 230.000 muertes.


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De acuerdo con Leiva, la inocuidad de los alimentos es una responsabilidad compartida
que involucra tanto de quienes producen, como de quienes procesan, venden, elaboran y
consumen los alimentos.

Manipular y preparar los alimentos de una manera segura es clave para frenar las consecuencias asociadas a alimentos insalubres. Estos consejos le ayudarán a ser un gestor de inocuidad, desde su propia casa.

1. Limpie: Esto incluye lavarse las manos antes y después de manipular alimentos, lavar también los utensilios antes de utilizarlos y las frutas y verduras antes de prepararlas y consumirlas.

2. Separe: aparte los alimentos crudos de los listos para consumir, use platos y tablas de cortar distintas para las frutas y verduras y para las carnes de res, aves, mariscos y huevos.

También, mantenga la carne de res, aves, mariscos y huevos separados del resto de los alimentos dentro del refrigerador. Cuando haga sus compras mantenga las carnes, pescado/mariscos y huevos separados de los otros alimentos en el carrito del supermercado.

3. Cocine completamente: y a las temperaturas recomendadas para cada tipo de alimento. Por ejemplo, el pollo a 74°C, carne a 63 °C en el caso de asados y 71 °C si cocina carne molida. El pescado, cocínelo 63 °C.

4. Enfríe de forma segura: Refrigere alimentos perecederos, como alimentos cocidos, dentro de las primeras 2 horas, no temperatura ambiente. Mantenga los alimentos refrigerados a ≤ 5˚ y jamás descongele ni marine alimentos sobre el mostrador a temperatura ambiente. Cuando lo haga, baje el producto al refrigerador.

5. Use agua y materias primas seguras: para esto, compre de fuentes confiables, use agua tratada o potable, prefiera alimentos pasteurizados y siempre lea completamente las etiquetas de los productos envasados antes de utilizar.