Imagen con fines ilustrativos

Redacción. La Conferencia Episcopal de Costa Rica anunció un protocolo especial para la reapertura gradual de las Iglesias el próximo 21 de junio. 

Entre las medidas sobresalen, un máximo de 75 personas, inicialmente, guardando la distancia establecida de 1.80 metros.

Además, cada Parroquia se organizará, para garantizar que solamente ingresen esa cantidad de personas a las Eucaristías.


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Para ello, habría distintas maneras de hacerlo, mediante levantamiento de listas por vía telefónica o WhatsApp y de seguro, mediante la caridad cristiana y comunicación entre fieles, grupos apostólicos y demás colaboradores.

También, mediante la emisión de tiquetes físicos que pueden ser retirados días antes de las celebraciones.

Además, se pide equipar los servicios sanitarios con papel higiénico, jabón antibacterial, alcohol o solución en gel con una composición de al menos 60%, toallas de papel para el secado de manos y agua potable.

Omitir el tradicional saludo de la paz y todo contacto físico, (lo cual no elimina el rito, pues podemos hacerlo con un saludo, levantando la mano o con un acto de reverencia).

De momento, el canto será entonado únicamente por quien o quienes lo animan. Se exhortará a los fieles a no unirse a los cantos.

Los templos solamente se abrirán para la Eucaristía, se habilitarán únicamente puertas para entrada y puertas solamente para salida.

Se puede ofrecer servicio de velación para el fallecido en las capillas que para tal efecto poseen algunas parroquias.

En el caso de los fallecidos a causa del COVID-19, está será con el ataúd sellado, conteniendo el cadáver introducido en doble bolsa hermética con todas las precauciones.

La última Eucaristía será a las 7:00 p.m. durante cualquier día de la semana, no excediendo más de dos celebraciones de lunes a sábado.

Los domingos, dependiendo del número de sacerdotes por Parroquia, se podrían multiplicar las celebraciones, no excediendo más de tres por sacerdote.

La colecta se realizará después de la sagrada comunión, pasando no más de dos personas en cada extremo de la banca para realizarla.