Foto: Viviana, kendall y Nicole, de izquierda a derecha.
  • El menor requería estar con su madre por su condición

Redacción- Una madre vecina de Curridabat asegura que se sintió humillada cuando una persona encargada de una feria en Tres Ríos, le impidió a ella y a su hijo entrar juntos al local.

Viviana Carmona denunció en entrevista con AM Prensa, que pese a indicar la condición de su hijo, quien tiene Transtorno de Espectro Autista (TEA), la persona en la puerta del local les negó el ingreso.

Carmona cuenta que esta persona le indicó que no podrían ingresar ambos por las medidas establecidas a raíz de la pandemia.

Esta madre asegura que conoce muy bien las medidas sanitarias, pero es muy consciente también de la situación que enfrenta como una persona que debe estar pendiente las 24 horas de su hijo, a quien ese día, además, no pudo dejar con ningún familiar.

«Nosotros siempre vamos a la feria y el sábado pasado hice la fila con mi hijo de 15 años, cuando estaba haciendo la fila, una señora me dijo, ‘no pueden entrar juntos’ y yo le dije, ‘es que mi hijo no puede estar solo'», contó Carmona.

Según la denunciante, la persona le indicó que «lo dejara ahí afuera, si quería», cuenta que se sintió «muy mal, humillada», como «si mi hijo tuviera que andar con un letrero», dijo.

Kendall, quien tiene 15 años, pero con una mentalidad de siete, según cuenta su propia madre, requiere de acompañamiento diario y a toda hora.

El menor portaba un pañuelo azul, que forma parte de una iniciativa de gobierno en medio de la pandemia para visibilizar a este grupo.

Precisamente, el pañuelo azul busca indicar que estas personas, por su condición, requieren salir; ya sea por temas de salud, bienestar psicofísico y emocional u otras, en donde necesitan el apoyo de sus familiares.

«Distintivo, que se colocará en el antebrazo, forma parte de las acciones de protección a esta población en el marco de la emergencia sanitaria por COVID-19», informó el gobierno el 13 de abril pasado.

No es la primera vez que este menor y su madre viven experiencias de este tipo, ha sufrido de bullying en su propia escuela.

Su madre señala que la falta de educación y de conocimiento sobre este grupo, hace que situaciones de discriminación como estas se presenten.

Luego de lo sucedido, Viviana y su hija Nicole, se comunicaron con las autoridades del Consejo Nacional de Personas con Discapacidad (Conapdis).

En estos momentos, la familia se encuentra en proceso para hacer una denuncia formal por lo sucedido.

Desde el Conapdis, se informó a este medio que durante la pandemia se ha habilitado un correo para atender denuncias como estas: covid19-oriente@conapdis.go.cr.

El proceso de denuncia de casos como estos se tramita como cualquier otro, la entidad investiga el caso y contacta a ambas partes para dar su versión.

Más allá de la denuncia, esta madre pide mayor visibilización, asegura que en el país hay poca información respecto a esta población.

«Falta mucha, mucha información, si yo le expliqué a esta persona la condición especial de mi hijo ‘¿por qué no me dejaron?’ Eso es lo que falta, que nos informemos, que se les diga», dijo Carmona.

Esta madre espera que su mensaje cale en la población y haga conciencia sobre la necesidad de atender de manera integral, las necesidades de este grupo y sus familias.

Este medio intentó comunicarse con los dueños de la feria, se les hizo saber el deseo de conocer su versión, pero no hubo respuesta al cierre de esta nota.