- En el hospital de Osa, los bebés están en una zona con aire acondicionado las 24 horas
Redacción – Elba Rosa Monge es una asistente dental del área de salud Osa, pero también una persona con un gran corazón que decidió tejer gorritos para que los bebés recién nacidos no pasen frío en el hospital.
En su tiempo libre, ella confecciona gorritos de lana decorados, que desde hace seis semanas se comenzaron a entregar a los bebés que nacen en el hospital Tomás Casas Casajús.
La enfermera obstetra del servicio de Maternidad, Yadira Bustamante, comentó que recientemente esta área fue trasladada a un nuevo sector donde permanecen con aire acondicionado las 24 horas y que en la zona anterior hacían mucho calor.
Por eso, las madres no van preparadas para el frío en la sala de maternidad nueva.
«Nos pasaron a un área donde es completamente frío, vimos que los bebés necesitaban un gorrito adicional, ahora les entregamos un gorrito de lana que se llevan a casa como recuerdo», mencionó Bustamante.
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Según Hernández, la iniciativa de los gorritos involucra a todo el personal de enfermería, el cual se ha organizado para donar los materiales y los diseños que teje Monge.
Incluso algunas compañeras ya han mostrado interés en aprender a tejer para apoyar la confección de estos.
Además de estos gorritos, Monge dona los materiales y teje los llamados «pulpitos tejidos», los cuales simulan un cordón umbilical, es decir, la conexión entre la madre y el bebé.
Esto les produce calma, tranquilidad y seguridad, en especial cuando no tienen su mamá cerca por ser bebés prematuros que deben permanecer en incubadora.
