Redacción – Un bebé de tan solo 19 horas de nacido, presentó una falla cardíaca por una malformación compleja en su corazón. Afortunadamente, su historia termina con un final feliz, pues los pediatras del Hospital La Anexión lograron salvarlo.

En este centro médico, ubicado en Nicoya, se había incorporado anteriormente un medicamento pediátrico especializado a la lista de fármacos del servicio de Neonatología se logró estabilizar al bebé.

Tras la atención, gestionaron su traslado al Hospital Nacional de Niños.

Uno de los pediatras que atendió y estabilizó al recién nacido fue el doctor Juan Carlos Zúñiga Guevara, quien luchó, junto a otros profesionales, para mantener con vida.

El bebé perdía oxigenación en su sangre conforme pasaban los minutos y su piel se tornaba color morado.

Ellos tuvieron que actuar con rapidez.

«Como es usual todos corrimos para salvar la vida de este bebé; que realmente estaba grave. Gracias a que el doctor Fabricio Sevilla visualizó traer el medicamento prostaglandina al hospital, logramos estabilizarlo y nos dio tiempo para hacer los trámites respectivos y trasladar al menor hasta el hospital Nacional de Niños», explicó Zúñiga.

La prostaglandina es un medicamento de uso neonatal y hace dos años empezaron a moverse para que llegara al centro de salud de Nicoya.

Este fármaco permite que el bebé se pueda oxigenar mientras se realiza el diagnóstico y la cirugía definitiva en un hospital especializado como el Nacional de Niños.

Según Datos del servicio de pediatría del hospital, es la primera vez en muchos años que se logra estabilizar un neonato con una malformación cardiaca compleja.

«En tiempo récord logramos que este pequeño se trasladara al Hospital de Niños, donde lo reportan estable. Hubo apoyo de muchos servicios para que este traslado se hiciera en tiempo y forma. Muy agradecido con Pediatría, Neonatología, Farmacia, Enfermería y Transportes», indicó el director del hospital, Anner Angulo.