Foto con fines ilustrativos / Padres y sus hijos consultan por salud mental en tiempos de pandemia.
  • El recurso fue declarado sin lugar

Redacción- La Sala Constitucional recibió un recurso de amparo a finales de octubre anterior contra las clases virtuales del Ministerio de Educación Pública (MEP).

Se trata de un amparo que cuestiona esta modalidad de clases por «recargar» trabajo en los padres de familia.

«Se cuestiona la educación virtual que imparte el MEP, por cuanto se recarga en los padres de familia. Se declara sin lugar», señala la Sala IV en la descripción del caso, pues aún está en redacción la sentencia.

Durante este periodo de clases a distancia, han surgido molestias por parte de padres de familia y de docentes, estos últimos han denunciado sobrecarga laboral en tiempos de pandemia.

Así lo hizo saber el presidente de la Asociación Nacional de Educadores (ANDE), Gilberto Cascante, quien participó de un conversatorio organizado por la Escuela de Primaria de la Universidad de Costa Rica (UCR) este pasado jueves 29 de octubre.


LEA TAMBIÉN: Posibilidad de que el curso lectivo 2021 inicie desde la virtualidad toma fuerza


Cascante detalló varias de las problemáticas que los docentes han enfrentado en este tiempo y que llegaron a ser denunciadas ante esta agrupación sindical.

«Algunas jefaturas irrespetaron el derecho a la desconexión virtual y teníamos el problema de que muchos directores, supervisores y asesores llamaban a los docentes a la hora que ellos quisieran a altas horas de la noche o prácticamente les mandaban mensajes en la madrugada de que tenían que presentar un documento al día siguiente, lo que generó angustia, temor», contó Cascante.

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) publicó los resultados de una encuesta este mes de octubre llamada «Experiencias de evaluación formativa entre miembros de comunidades educativas latinoamericanas».

En esta, se señala como un desafío por resolver, la sobrecarga laboral de docentes, principalmente por falta de espacio para poder atender a todos los estudiantes mediante la virtualidad.

Según ese estudio, «si bien las escuelas parecen estar apoyando correctamente a sus docentes, estos perciben una saturación al intentar atender a todos sus estudiantes».