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  • Facebook, Instagram y WhatsApp son un mismo ecosistema de aplicaciones
  • Profesionales explican qué sucede si se siguen usando otras redes sociales

Redacción – Las nuevas políticas de privacidad de WhatsApp tienen a los usuarios investigando sobre otras alternativas de aplicaciones de mensajería instantánea a través de Internet, pero ¿es esa realmente la solución?

WhatsApp pertenece a la gran compañía de Facebook, la cual también es dueña de Instagram. En las nuevas políticas se explica que podrán compartir información de los usuarios con empresas y eso no es del agrado de muchos.

Quien no acepte las condiciones, no podrá seguir utilizando la aplicación. Por ello, hay quienes han decidido pasarse a Telegram o Signal, ambas apps de mensajería.

Investigadores de la compañía líder en detección proactiva de amenazas, ESET, dan la respuesta a diferentes preguntas de los usuarios.

¿Realmente WhatsApp espía a los usuarios?

ESET explica que estos cambios no implican que Facebook pueda leer o acceder a los mensajes privados de los chats y/o grupos en WhatsApp.

«La aplicación implementó hace un tiempo un algoritmo de cifrado de extremo a extremo en las conversaciones. Esto significa que el mensaje se cifra antes de salir del dispositivo, con la clave única de cada usuario, y solamente se puede descifrar en el dispositivo del usuario destinatario del mensaje», explican.

Por lo tanto, si el mensaje es interceptado va a ser prácticamente imposible de descifrar.

Entonces, ¿en qué consisten los cambios?

Facebook compró la aplicación WhatsApp hace más de seis años y, desde entonces, confeccionó un ecosistema de aplicaciones -incluyendo Instagram-, logrando integrar los datos de sus usuarios en un perfil único.

El objetivo es poder acercar a los usuarios productos, servicios y promociones asociados a los gustos de cada uno, lo que implica mayores ganancias para Facebook por sus campañas publicitarias efectivas.

Con las nuevas políticas, Facebook podrá conocer las cuentas con las que interactúa un usuario, si estas son cuentas de empresas, en qué momento utiliza esos servicios, dirección IP con la que se conecta o datos del dispositivo móvil del usuario.

¿Sirve cambiarse a otra app de mensajes?

«Si bien es cierto que aplicaciones como Signal fueron pensadas para ofrecer mayores niveles de privacidad, el hecho de dejar de utilizar WhatsApp, pero seguir usando Instagram o Facebook, implica que seguimos compartiendo una gran cantidad de datos. Esto dejando de lado a empresas como Google o Microsoft, que también ofrecen una gran cantidad de servicios a cambio de sus datos», explicó el jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica, Camilo Gutiérrez.

En el caso de Telegram, el cifrado de las conversaciones no viene por defecto en todas las conversaciones, sino únicamente en aquellas que el usuario decida hacerlo, mientras que Signal o WhatsApp lo tienen por defecto para todas las comunicaciones.

Por otra parte, Signal es la única aplicación de código abierto y está patrocinada por una fundación sin fines de lucro que obtiene fondos de usuarios y de grandes empresas como Amazon, mientras que Telegram y WhatsApp tienen inversores privados como fuente de financiamiento, según ESET.

 ¿Los cambios de WhatsApp pueden ser positivos?

«Quizá hay usuarios para los cuales los cambios que se implementarán en WhatsApp les resulten positivos y les interese que les acerquen contenidos alineados a sus gustos. O también hay otros usuarios a los cuales la idea de estar en un sistema en el cual tenga tanto conocimiento de sus gustos, los haga sentirse observados y limitados en lo que pueden conocer», agregó Gutiérrez.

La empresa de ciberseguridad agrega que los riesgos al momento de usar la tecnología van a existir, por lo que es parte de la responsabilidad como usuarios conocer estos riesgos para tomar las medidas de protección adecuadas.