• Caso más reciente ocurrió el lunes anterior
  • También se ha remitido ante autoridades a gran cantidad de extranjeros

Redacción- La ardua lucha que libra la Policía de Fronteras, junto con otras autoridades, contra los delitos transfronterizos permitió detener, durante este 2020, a 70 presuntos responsables del delito de tráfico ilícito de personas.

De igual forma estas operaciones han implicado aprehender y remitir ante el Ministerio Público a gran cantidad de extranjeros en condición migratoria irregular, a fin de que rindan testimonio contra los detenidos.

De acuerdo con los registros del citado cuerpo policial, perteneciente al Ministerio de Seguridad Pública, la gran mayoría de aprehensiones tuvieron lugar en la frontera norte con 66 casos, es decir el 94% de las detenciones.

Los 4 casos restantes fueron atendidos en la frontera sur.

El cantón norteño donde más casos se registraron este año es Los Chiles con 34 detenidos, seguido de La Cruz con 30 capturas.

Siempre en la frontera norte, la localidad de Crucitas de Cutris, cantón de San Carlos, registra dos casos.

En el sur cuatro presuntos traficantes de personas fueron aprehendidos, tres de ellos en el Puesto de Kilómetro 35, cantón de Golfito y uno en Sixaola, cantón de Talamanca.

El delito de tráfico ilícito de personas está sancionado con penas de 2 a 6 años en su forma ordinaria y de 3 a 8 años en su modalidad agravada.

El caso más recientes tuvo lugar el lunes pasado precisamente en la frontera norte, cuando oficiales de la Policía de Fronteras destacados en La Cruz, detuvieron a un costarricense de apellido Avilés.

El sujeto fue aprehendido en la localidad de San Rafael de Peñas Blancas cuando transportaba en su vehículo a tres nicaragüenses en condición migratoria irregular.

Según lo manifestado por los extranjeros, el sospechoso les cobró 5.000 colones a cada uno por llevarlos de San Dimas hasta el sitio donde los interceptaron los oficiales fronterizos.

Avilés es reincidente en este tipo de hechos, ya que en otras dos ocasiones las autoridades lo habían detenido por presuntamente incurrir en el delito de tráfico ilícito de personas.

Esta vez fue detenido y puesto a la orden de la Fiscalía de Flagrancia de Liberia.

En la mayoría de estos casos la Policía de Fronteras ha realizado estas aprehensiones en coordinación con otros cuerpos policiales como la Policía de Migración, la Fuerza Pública y la Policía de Tránsito.

En ocasiones este último cuerpo policial ha tenido que decomisar los vehículos usados por los sospechosos, ya que han incurrido en faltas como el transporte público de personas sin estar autorizados para ello.

Además, en algunas oportunidades no cuentan con licencia y sus automóviles y motocicletas no tienen ni marchamo ni revisión técnica al día.

La lucha contra el tráfico ilícito de personas también implica una estrecha coordinación con las diferentes fiscalías, tanto para poner a sus órdenes a los detenidos como para remitirles a los migrantes que figuran como testigos en estos casos.

Elaborado por prensa Ministerio de Seguridad Pública.