Foto con fines ilustrativos / Padres y sus hijos consultan por salud mental en tiempos de pandemia.

Redacción– Debido a la pandemia las tareas que realizan las mujeres en sus hogares aumentaron.

Si bien previo a la crisis del COVID-19 ya era común hablar de la doble jornada femenina, un estudio realizado por  Prosalud encontró que, en un grupo de mujeres decisoras de compra, destacan ocho roles principales, algunos de los cuales ya tenían previo a la pandemia pero que se han intensificado, dos que se sumaron a su rutina y uno que se mantuvo, pero con ajustes en la dinámica.

Ante esta situación y de acuerdo con las responsabilidades que asumen en sus hogares, las participantes indicaron que desean que las marcas desarrollen alianzas y que deben esforzarse de manera grupal, clara y auténtica para apoyar a las familias. 

Mujeres cumplen ocho roles distintos en pandemia

Este estudio fue realizado de carácter cualitativo. Se desarrolló en seis sesiones con mujeres desde los 25 hasta los 55 años, de la Gran Área Metropolitana, de nivel socioeconómico medio.

La investigación buscó explorar emociones, necesidades, cambios en los roles desempeñados, así como entender cómo las marcas pueden ayudar en este contexto.

Dentro de las conclusiones de la investigación se identificaron hasta ocho roles que cumplen las mujeres en sus hogares.

Seis de ellos se mantienen, pero con algunos cambios a raíz de la situación sanitaria. Estos son:

  • Conserje: es decir, la mujer funge como encargada principal de la limpieza del hogar. Como la familia está más tiempo en la casa, esta se ensucia más lo que se traduce en limpiar y ordenar más frecuentemente. 
  • Cocinera: al ser quien prepara los alimentos y dado que la familia come más en la casa, esto significa cocinar más, pero también comprar más productos para meriendas.
  • Maestra: son las principales encargadas de ayudar a sus hijos con el estudio dado el esquema de enseñanza virtual. Han tenido que buscar más conocimientos, tiempo y energía que antes. 
  • Psicóloga: dan apoyo emocional a sus hijos, pareja, escuchan quejas, problemas y dan consejos. La mujer llega inclusive a ignorar su propio estrés para darle soporte afectivo a los miembros de su hogar. 
  • Doctora: es la primera línea de atención, receta remedios caseros y decide cuándo es necesaria la visita a un servicio médico.
  • Administradora del hogar: trata de maximizar el valor recibido en cantidad y calidad versus precio, especialmente ante ingresos reducidos o la incertidumbre por el futuro.

Uno de los roles que ya existía también se ha modificado:

  • Trabajadora: muchas mujeres tienen trabajos fuera del hogar, labor que también se ha visto afectada. Si no se han reducido sus ingresos, muchas indican que sus tareas se ven interrumpidas frecuentemente por las exigencias que tienen como madres. Si deben salir del hogar, sienten temor de contraer el virus y llevarlo a sus casas. 

También asumieron roles nuevos, producto de la pandemia:

  • Ministra de protocolos: se volvieron las encargadas de aplicar las nuevas medidas de higiene en su hogar para evitar el coronavirus. 

Animadora: dado que la familia se encuentra mucho más tiempo en la casa, se sienten responsables de mantenerla entretenida y anular el aburrimiento.

“Las consecuencias de la pandemia nos van a seguir acompañando mucho tiempo más. Las empresas debemos seguir siendo solidarias y buscar nuevas maneras de continuar apoyando porque aún hay muchas personas que lo necesitan.

Es lo que la gente -que durante mucho tiempo nos ha honrado con su preferencia-, espera y merece de parte de productos tan reconocidos como los que estamos representados en este programa”, comentó Gloriana Fernández, gerente de marca de Sardimar.

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