• Directora del HNN califica como «indignante» esta situación
  • Médicos internos son estudiantes de medicina que realizan rotaciones en hospitales

Redacción – La directora del Hospital Nacional de Niños (HNN), Olga Arguedas, considera que la asistencia de dos médicos internos a una fiesta clandestina en Escazú, en media pandemia, es «indignante» y que investigarán para aplicar las medidas necesarias.

Así lo hizo saber a la prensa mediante un audio enviado por el departamento de comunicación, donde indicó que ya iniciaron las investigaciones.

«Continuaremos indagando el caso a profundidad. Esta es una situación indignante que requiere una investigación profunda y que se apliquen las medidas legales correspondientes», indicó Arguedas.

Preliminarmente se comprobó que ellos son estudiantes del último año de medicina y, en este momento, se encuentran en el bloque del internado en el HNN, donde realizan la rotación supervisada.

Es decir, no son funcionaros de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) ni trabajan directamente para este centro médico, como ellos lo indicaron al momento de la intervención de la fiesta por parte de la Policía Municipal de Escazú.

Los estudiantes internos de medicina manifestaron a los policías que a las 5:00 de la mañana debían dirigirse al Hospital de Niños para realizar las visitas médicas.

Incluso, uno de los internos se negó a mostrarle su cédula a las autoridades y se queja del «ironismo» con el que le habla el policía.

«Usted es un doctor, sea una mejor persona. Un profesional», le dijo el oficial.

Los oficiales se dirigieron al sector Alto de las Palomas, donde se comprobó que efectivamente se realizaba una fiesta clandestina por los múltiples carros estacionados y el alto sonido de la música.

Los vecinos reportaron escándalo, consumo de licor y vehículos en la vía incluso después de la restricción vehicular nocturna.

Debido a la pandemia por el Covid-19, el tránsito de vehículos está limitados entre las 9:00 de la noche y las 5:00 de la mañana a excepción de la movilización con motivos laborales o de emergencia.

Además, las aglomeraciones están prohibidas a nivel nacional en el marco de la circulación del SARS-CoV-2, por lo que las fiestas tampoco pueden darse a menos de que se realicen dentro del horario de funcionamiento en los locales con permiso, como los bares, siempre cumpliendo las medidas de prevención.