- Aseguran que las elecciones no fue libre, fue injusta y no democrática
- Brindarán ayuda a Nicaragua para responsabilizar a Ortega y su esposa
Redacción- El gobierno de Estados Unidos se refirió a las elecciones organizadas por el régimen de Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo.
Las votaciones fueron calificadas por los estadounidenses como injustas, no democráticas, no libres y una farsa.
También, advierten que utilizará todas las herramientas diplomáticas y económicas a su disposición para apoyar al pueblo de Nicaragua y responsabilizar al gobierno de Ortega-Murillo y a quienes facilitan sus abusos.
Así lo indicó el presidente estadounidense Joe Biden, el siguiente comunicado de la Casa Blanca:
Lo que el presidente nicaragüense Daniel Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, orquestaron hoy fue una elección pantomima que no fue ni libre ni justa, y ciertamente no democrática. El encarcelamiento arbitrario de casi 40 figuras de la oposición desde mayo, incluidos siete posibles candidatos presidenciales, y el bloqueo de la participación de los partidos políticos manipularon el resultado mucho antes del día de las elecciones. Cerraron medios independientes, encerraron a periodistas y miembros del sector privado e intimidaron a las organizaciones de la sociedad civil para que cerraran sus puertas. Durante mucho tiempo impopulares y ahora sin un mandato democrático, la familia Ortega y Murillo ahora gobiernan Nicaragua como autócratas, no diferente de la familia Somoza contra la que Ortega y los sandinistas lucharon hace cuatro décadas.
Estados Unidos respalda el derecho inalienable a la autodeterminación democrática del pueblo nicaragüense y de cualquier otro país del hemisferio donde la soberanía popular se vea comprometida por la erosión de las normas democráticas, la asfixia del espacio cívico o las violaciones de las leyes fundamentales. derechos. La Carta Democrática Interamericana obliga al hemisferio a defender los derechos democráticos del pueblo nicaragüense. Hacemos un llamado al régimen Ortega-Murillo para que tome medidas inmediatas para restaurar la democracia en Nicaragua y para que libere de manera inmediata e incondicional a los encarcelados injustamente por hablar en contra de los abusos y clamar por el derecho de los nicaragüenses a votar en elecciones libres y justas. Hasta entonces, Estados Unidos, en estrecha coordinación con otros miembros de la comunidad internacional, utilizará todas las herramientas diplomáticas y económicas a nuestra disposición para apoyar al pueblo de Nicaragua y responsabilizar al gobierno de Ortega-Murillo y a quienes facilitan sus abusos.