- Personal docente se encuentra cubriendo la aplicación de este instrumento sin que se brinden las condiciones mínimas
Redacción- El día de hoy la Asociación Nacional de Educadores y Educadoras (ANDE), denunció irregularidades y contenido machista que incentiva a la violencia contra las mujeres en las pruebas de Fortalecimiento de Aprendizajes para la Renovación de Oportunidades (FARO).
En los contenido de las pruebas FARO se está enseñando estereotipos machistas que históricamente han limitado los derechos de las mujeres, además de incentivar la violencia contra las mujeres y promoviendo una educación sexista, lejos de los principios de equidad, igualdad y respeto que el modelo educativo costarricense debe promover.
El día de hoy, se hizo viral un joven que decidió alzar la voz y mostrar públicamente el contenido machista en las pruebas de Español, en donde el joven expresa que le parece inapropiado el hecho de que solo se vean textos machistas, lean de discriminación, violencia, entre otros pero que no se les de herramientas para luchar contra estas problemáticas.
Con todo eso, una vez más de demostró el poco interés que la aplicación de FARO representa para la familia costarricense, debido que, nuevamente se violentó la integridad física y emocional del estudiantado.
En un comunicado oficial, ANDE, aseguró que ha reiterado en múltiples ocasiones que FARO representa un modelo de evaluación estandarizada, con menos ítems y menos posibilidades de respuesta. Además el personal docente se encuentra cubriendo la aplicación de este instrumento sin que se brinden las condiciones mínimas, como alimentación o relevo en caso de surgimiento de alguna emergencia.
Ademas, al personal no se le permite alimentarse o interrumpir la labor de cobertura, hasta no haber concluido el proceso de revisión del material de la prueba. Finalizada la prueba, el personal docente son obligadas a cumplir horario en muchos centros educativos; no se les permitió retirarse una vez terminada su labor.
Asimismo, ANDRE demanda que se intensifiquen las revisiones del contenido de las preguntas de la prueba, para asegurar que no se reproduzcan estereotipos que perpetúen la cultura de la violencia contra las mujeres y las niñas. También, exige que el MEP atienda inmediatamente estas situaciones que lesionan los derechos del estudiantado y del cuerpo docente.