Foto: Jader Flores.
  • Ticos – nicas son fundamentales en la bicolor pinolera 

Redacción – Con sangre tica en su nómina, la Selección Nacional de Nicaragua sorprende al festejar triunfo de oro con cifras de 2-1 ante Trinidad y Tobago en la Liga de Naciones de Concacaf.

Douglas Forvis bajo palos, Cristian Reyes en defensa y Bryan López en ataque, fueron los costarricenses nacionalizados pinoleros que fueron estelares con la bicolor, que dejó en banca a Francisco Flores Zapata, otro tico que viste los colores nicas.

Mientras, que con Trinidad y Tobago fue estelar Aubrey David, jugador del Saprissa. Con un Estadio Nacional de Managua a reventar, Nicaragua salió motivada en busca de la victoria ante los caribeños, que echaron mano de su velocidad para incomodar.

La presencia de los costarricenses en cancha fue vital, pero principalmente Bryan López que fue un pesadilla para los trinitarios, que vieron como los nicaragüenses fueron metiendo en aprietos a la nación que viste de rojinegro.

Esas ganas de los vecinos del norte dio buenos frutos al minuto 45+1, luego de que Josué Quijano se llenara de confianza con un certero remate raso, que ayudado con un desvío caribeño deparó el ¡GOOOL! del 1-0 para Nicaragua.

Este tanto hizo que los pinoleros se fueran al descanso arriba en el marcador. En la etapa complementaria, Trinidad y Tobago respondió rápido, ya que sobre el minuto 46, Cristian Reyes incurrió en un autogol tras un remate de un trinitario y que así cayera el 1-1.

Pese a ese golpe de la igualdad caribeña, Nicaragua no dejó de luchar dentro de la cancha, donde tuvieron como figura a Byron Bonilla, jugador del Cartaginés, que es el motor del combinado pinolero, que basa gran parte de su juego en el volante.

Cuando la intensidad del encuentro estaba en un nivel bastante alto, las luces del reducto nica se apagaron al minuto 68, lo que generó que el juego se detuviera por lapso de 20 minutos. Al regresar el fluido eléctrico, Nicaragua se fue con todo por el triunfo.

Los pinoleros tuvieron su premio a sus ganas en la cancha y al minuto 78, Byron Bonilla se llenó de confianza y con un espectacular remate desde fuera del área venció al arquero rival para sellar el ¡GOOOOL! del 2-1 y así volver una locura las graderías.

Esta anotación de Bonilla fue lapidaria para Trinidad y Tobago, que no tuvo capacidad de reacción y terminó viendo como Nicaragua se dejó la victoria de 2-1 ante su afición, que enloqueció tras el pitazo final del costarricense, Keylor Herrera.