• Fue votado afirmativamente luego de que la Sala IV resolviera una consulta preceptiva que recibió la propuesta.

Redacción – Los diputados que conforman la Asamblea Legislativa le dieron luz verde a un proyecto que establece un tratado de extradición entre las República de Argentina y la República de Costa Rica.

El tema fue abordado por los legisladores la tarde de ayer jueves en la sesión del Plenario, esto luego de que conocieron la resolución dada por la Sala Constitucional.

Autoridad que se pronunció luego de conocer la consulta preceptiva, en el sentido de que el expediente no presenta problemas por el fondo ni por la forma.

Proceso que le permitió a los ocupantes de las curules votar afirmativamente de esta propuesta que se encuentra dentro del expediente 22.202, mismo que terminó recibiendo el apoyo de 41 integrantes del Congreso.

Esta cantidad de votos es más que suficiente para darle paso a este proyecto, mismo que representa un instrumento jurídico con el que ambos países se comprometen a la entrega de persones reclamadas para ser procesadas o para el cumplimiento de su respectiva  sentencia en el territorio del país que lo reclama.

Según establece la propuesta, las personas que podrán ser extraditadas tienen que haber cometido conductas que son penalizadas con, al menos, dos años de prisión, la pena debe estar en firme y además el tiempo que le falte por cumplir de su condena, debe ser superior a un año.

Otro aspecto que detalla el documento es que la extradición no se concederá por delitos políticos o hechos conexos con esa naturaleza.

Ante esto, se deja en claro que no se consideran delitos políticos actos como: el atentado contra la vida, la integridad física o la libertad de un Jefe de Estado o de Gobierno.

Inclusive, también se descartan delitos como el de genocidio, los crímenes de guerra o los crímenes de lesa humanidad.

También se protege en casos de que el Estado que reciba la solicitud de extradición tiene motivos fundados para creer que la solicitud se formula con miras a procesar o castigar a una persona por causa de su raza, religión, nacionalidad, origen étnico, opiniones políticas, sexo.