• Uno de los detenidos es encargado del centro, del otro se desconoce su cargo
  • También se allanaron oficinas del PANI, pues enviaban menores al lugar 

Redacción- Este miércoles se realizó una serie de allanamientos por un caso de agresiones y torturas a menores de edad en un hogar de cuido en Coronado.

Como resultado de las diligencias, desarrolladas en oficinas del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) y en el Albergue San Agustín, se detuvo a dos hombres vinculados con el caso.

Se trata del encargado del centro de cuido, un hombre de 32 años de apellido Esquivel y otro de apellido Padilla, de 30 años, quien es un funcionario del PANI, al parecer quien estaba a cargo de uno de los expedientes del caso.

La investigación  inició en febrero del presente año, cuando el Ministerio Público del Segundo Circuito Judicial de Goicoechea recibió dos denuncias de los hechos.

De acuerdo con el Organismo de Investigación Judicial, que se encarga de las pesquisas en el lugar, los menores que vivían en el albergue tenían edades que van desde ls 12 hasta los 17 años y serían las víctimas del delito.

Trascendió, que los menores eran encerrados en un cuarto de aislamiento y, en apariencia, eran amarrados de pies y manos en una cama con una colchoneta.

Según el OIJ, cuando se encerraban a los menores en el lugar se les vigilaba mediante una cámara de seguridad y, además, se les privaba de alimentación y del uso del servicio sanitario.

«Al aparecer, cuando se dan altercados entre los menores o bien no hay un buen comportamiento de algunos ellos, supuestamente los encargados de dicho hogar los meten a una habitación de contención, donde presuntamente los dejan por cuatro horas amarrados de pies y manos en unas agarraderas que están adheridas a la cama que hay en el sitio, siendo que, al parecer, durante ese tiempo no les dan alimentación, ni pueden utilizar el servicio sanitario y los mantienen vigilados por una cámara de vídeo», informó la policía judicial. 

Por este caso, las autoridades también dirigieron un allanamiento en una oficina del Patronato Nacional de la Infancia, ubicada en San Antonio de Coronado, donde se decomisó documentación importante para la investigación.

Mientras tanto, en el albergue, el OIJ confirmó que se incautó evidencia relevante para el caso.